Internacional

10,000 iraníes rinden homenaje a Mahsa Amini a 40 días de su muerte

En este país, cuando muere un familiar, el periodo de duelo es de 40 días que al termino la familia visita al difunto en su tumba para rendirle un último homenaje

Saqqez, Irán. – (Agencias) Lejos de aceptar las llamadas y la represión para que cesen las protestas y manifestaciones por parte de las autoridades de Irán, al menos 10,000 iraníes han desafiado al gobierno y han realizado un homenaje a la mujer kurda muerta en el cuartel de la policía de la moralidad en Irán, que fue detenida por no usar el velo obligatoria para las mujeres en este país musulmán.

En este país, cuando muere un familiar, el periodo de duelo es de 40 días que al termino la familia visita al difunto en su tumba para rendirle un último homenaje. El miércoles se cumplieron los 40 días de la muerte de la joven Mahsa Amini, de 22 años, que ha desatado las mayores protestas en el país desde 2019. Por tal motivo, cerca de 10,000 personas se congregaron en el cementerio donde descansan los restos de Amini, desafiando a las autoridades y al amplio despliegue policías que desde temprano trataron de impedir la concentración.  

De acuerdo con un testigo citado por el diario español El País, las fuerzas del orden dispararon contra la multitud reunida ante la tumba de Amini en el cementerio de su ciudad natal, Saqqez, en el Kurdistán iraní, a unos 570 kilómetros al oeste de Teherán, la capital iraní. El mismo testigo aseguro que decenas de personas fueron detenidas. Por su parte, la ONG Hengaw, una organización no gubernamental de derechos humanos kurda en el exilio declaró que las fuerzas policiales habían disparado y lanzado granadas de gas lacrimógeno a la multitud reunida en la Plaza Zindan de esa misma ciudad.  

La agencia de noticias semioficial iraní ISNA confirmó los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los asistentes al homenaje. “Un número limitado de los presentes en el memorial de Mahsa Amini se enfrentó con las fuerzas policiales en las afueras de Saqqez y fueron dispersados. Tras los enfrentamientos, se cortó Internet en la ciudad por motivos de seguridad”, aseguró la agencia, que estimó la cifra de asistentes a la ceremonia alrededor de unos 10,000.

Desde primeras horas del día, se pudo observar largas filas de manifestantes que se dirigían al cementerio a través de video y fotografías que los activistas subieron a las redes sociales, incluso a muchos vadeando un arroyo para evitar los controles de diferentes fuerzas del orden y paramilitares cerca del lugar donde se encuentra enterrada Amini.

Un testigo de Saqqez declaró a la agencia de noticias Reuters, que el cementerio estaba lleno de milicianos Basil y de policías. “Intentaron impedirnos acceder al cementerio, pero conseguí entrar”, explicó el hombre. Otro residente aseguró: “La gente ha desafiado las advertencias de las fuerzas de seguridad y está yendo al cementerio, pero hay decenas y decenas de policías antidisturbios y miembros de la milicia Basij”.

El operativo de las fuerzas de seguridad se desplegó no solo en la ciudad nata de Amini, sino que se extendió a ciudades del norte del país como Tabriz y Rasht y también a Teherán, de acuerdo con otros iraníes citados de forma anónima por esa agencia de noticias.