Londres, Inglaterra. – (Agencias) La organización por los derechos humanos, Amnistía Internacional, ha dejado de otorgar el estatus de “preso de conciencias” a Alexéi Navalny, ante la presión por sus pasados discursos de “odio racial” contra los migrantes en Rusia.
A pesar de que, los empleados de la organización de derechos humanos creen que los mensajes recibidos sobre el discurso de odio de Navalny eran “parte de una campaña para desacreditarlo en el extranjero”, pero estaban obligados a cambiar su designación.
Alexander Artemev, director de medios de Amnistía Internacional para Europa y Asía Central, dijo a TV Rain que efectivamente ya no iban a usar la frase “preso de conciencia” con respecto a Navalny, después de haber revisado los comentarios que hizo en la década de los años 2000, y haber corroborado de que cumplen con los parámetros de “discurso de odio”.
Por su parte, Margarita Simonyan, directora de la agencia de noticias rusa RT, publicó en un tuit que “Occidente estaba llorando porque esto sucedió después de que nuestro columnista usara ejemplos concretos de que él [Navalny] es un nazi”.
Y, agregó: “¡Feliz Defensor del Día de la Patria, compatriotas!”.
Aunque los comentarios no fueron especificados, Navalny, de 40 años, estaba involucrado en un movimiento de extrema derecha en aquellos años, y utilizó los medios para expresar fuertes opiniones cargadas de odio a los migrantes.
En un video que realizó, Navalny sale vestido de dentista y compara a los migrantes con los dientes podridos.
Según el propio Navalny, se ha retirado de esa posición política, sin embargo, se ha negado a desmentir sus comentarios en entrevistas pasadas, incluyendo una con The Guardian en 2017.
El cambio de política de Amnistía Internacional fue interno y se reveló debido a un intercambio de correos que publicó en Internet el periodista estadounidense Aaron Maté, un critico del opositor Alexéi Navalny.
La secretaria interina de Amnistía Internacional, Julie Verhaar, dijo en declaraciones enviadas por correo electrónico el miércoles que «la especulación en torno al uso del término ‘prisionero de conciencia’ por parte de Amnistía Internacional está restando atención a nuestra demanda central de que [Navalny] sea liberado inmediatamente».
También, dijo que “preso de conciencia” denota criterios específicos establecidos por el organismo y que “nada de lo que Navalny haya dicho en el pasado, justifica su detención actual”.
