Internacional

Acción decidida de Lula frustró el golpe de estado

El ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, dijo el martes que creía que el ataque de la extrema derecha del domingo contra las tres ramas del poder del país fue un “acto de terrorismo” diseñado para derrocar a Lula

Brasilia, Brasil. – (Agencias) Uno de los principales ministros del presidente dijo al diario inglés The Guardian, que la insurrección que sacudió la capital de Brasil fue un intento orquestado de golpe de estado que fue frustrado gracias a la rápida y decidida reacción del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

El ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, dijo el martes que creía que el ataque de la extrema derecha del domingo contra las tres ramas del poder del país fue un “acto de terrorismo” diseñado para derrocar a Lula, y, agregó, que la insurrección en apoyo al expresidente extremaderechista Jair Bolsonaro podría haber tenido éxito si no hubiera sido por la decisión de Lula de ordenar la intervención federal que puso a su cargo la seguridad de la capital brasileña, Brasilia.

Alexandre Padilha

El gobernador del Distrito Federal de Brasilia, el bolsonarista Ibaneis Rocha, fue suspendido de su cargo el domingo por la noche en medio de la indignación por el actuar de la policía local que no detuvieron a la multitud de seguidores del expresidente que asaltó las sedes de la presidencia, del poder judicial y del legislativo el domingo pasado.

Al denunciar lo que llamó “ataques terroristas” en el corazón de la democracia brasileña, Padilha dijo que: “Si el gobierno del Distrito Federal hubiera actuado según lo acordado con el ministro de Defensa y el ministro de Justicia, nada de lo que pasó el domingo hubiera pasado”.

“Tal vez, si no hubiéramos tenido un líder con el apoyo popular y la capacidad de construir puentes políticos que disfruta el presidente Lula… la historia de Brasil podría haber sido diferente en lo que respecta al intento de golpe, [y] la toma de la corte suprema, el congreso y el palacio presidencial”, dijo Padilha.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, los gobernadores y los jueces de la Corte Suprema caminan desde el Palacio de Planalto hasta el edificio de la Corte Suprema en Brasilia

Elogió la unidad mostrada por los lideres de la Cámara Baja, de la Corte Suprema, del Congreso de Brasil, y a los 27 gobernadores regionales del país, que se reunieron en la explanada cubierta de escombros frente al Palacio de la Presidencia, el lunes por la noche, en una poderosa muestra de apoyo al nuevo gobierno del presidente Lula y a la democracia brasileña.

“Todo eso se detuvo, se detuvo gracias a la respuesta firme del presidente Lula”, y al consenso prodemocracia entre líderes políticos de todas las tendencias, agregó Padilha.  Sin embargo, quien orquestó y financio el ataque violento de los seguidores del expresidente, y sus objetivos concretos sigue sin estar claro.

De acuerdo con Padilha, los seguidores del extremaderechista Bolsonaro llegaron a la capital convencidos de que el ataque cerraría la presidencia, el congreso y la Corte Suprema de Brasil, y un “comando político” asumiría los poderes con la ayuda de los militares y otras fuerzas de seguridad simpatizantes con el golpe de estado.

“Muchos de ellos [imaginaron que sus acciones] podrían abrir la puerta a algún tipo de acción por parte de los agentes de seguridad o miembros de las fuerzas armadas que imposibilitarían el funcionamiento del gobierno brasileño y perjudicarían el papel de la corte suprema”, dijo.

De acuerdo con Padilha, la inteligencia brasileña tenía conocimiento de que refuerzos bolsonaristas iban a llegar el domingo por la noche de tres estados del país: Sao Paulo, Minas Gerais y Goiás para reforzar el golpe de estado.