Al participar en la reunión ordinaria de la Comisión de Economía, el senador Miguel Riquelme Solís aseguró que, a Coahuila, uno de los principales productores del sector automotriz para el mercado internacional, le afectan severamente los decretos de regularización de autos “chocolate”, ya que, a final de cuentas, lo que fomentan es contrabando de carros hacia México, lo que se refleja incluso en una merma para la recaudación fiscal federal.
Con relación al Dictamen de la Comisión de Economía, por el que se desecha el punto de acuerdo en el que se exhorta a la Secretaría de Economía a considerar la conveniencia de publicar el decreto por el que se modifica la prórroga y regula la importación definitiva de vehículos usados, publicado en el Diario Oficial de la Federación del 24 de diciembre de 2020 -y cuya vigencia venció el 30 de septiembre de 2024-, el legislador federal expresó:
“Este tipo de decretos se convierten en un mercado abierto para los autos chocolates. Afectan a la industria automotriz, al creciente mercado de autopartes, a la generación de fuentes de empleo que derivan de este importante sector productivo que apuntala la economía coahuilense, entre otros”, dijo.
En Coahuila -que lidera la atracción de inversión automotriz en México pues recibe el 28 por ciento de la Inversión Extranjera Directa en cifras actuales- el impacto es grave, por lo que deben tomarse en cuenta en lo sucesivo, a las zonas fronterizas, señaló.
“Coahuila como un pilar de la industria automotriz en México, tiene una amplia producción de distintas marcas para el sector de la electromovilidad, es productor de autopartes, y es afectado en su economía. Pero, además, los productores empiezan a frenar producción, horas de trabajo y muchas otras consecuencias que se tienen como medidas de presión”, dijo el senador de la República.
Riquelme Solís explicó en su posicionamiento particular ante los integrantes de la Comisión de Economía que, si bien en esta ocasión se trata de desechar el punto de acuerdo, su voto es a favor es debido a que en el sexenio anterior ya se había emitido un decreto, supuestamente para regularizar la importación definitiva de vehículos de procedencia extranjera, y cuya vigencia sería hasta noviembre de 2025.