Mogadiscio, Somalia. – (Agencias) En Mogadiscio, la capital de Somalia, un grupo de yihadistas atacaron el Hotel Hayat, dejando al menos 20 muertos y unos 40 heridos. El ataque comenzó el viernes por la noche con explosiones en el exterior del hotel antes de que un grupo de hombres armados entrara en el edificio.
Al Shabab, un grupo somalí afiliado desde hace una década a Al Qaeda, que intenta derrocar al Gobierno para imponer un Estado islámico ultraconservador reivindicó el ataque en un comunicado.
Las detonaciones enviaron enormes columnas de humo sobre Mogadiscio y los disparos resonaron por toda la ciudad. Grandes secciones del hotel Hayat fueron destruidas por los enfrentamientos, dijeron testigos. Los yihadistas entraron por la fuerza en el edificio, frecuentado por políticos y funcionarios del Gobierno, y dispararon al azar a los civiles que se encontraban en él, matando al propietario y a otros empresarios.
Pasaron alrededor de 30 horas antes de que se informara que las autoridades habían retomado el hotel alrededor de la medianoche, hora local, del sábado. «Las fuerzas de seguridad terminaron el asedio ahora y los hombres armados están muertos, no hemos recibido disparos desde el edificio en la última hora», dijo un comandante de seguridad, hablando anónimamente, a la Agence France-Presse.
El funcionario no dio el número de muertos y heridos, ni cuantos de los yihadistas de al-Shabab murieron en el ataque, pero dijo que el gobierno dará una conferencia el domingo por la mañana.
Este es el primer incidente terrorista de importancia en Mogadiscio desde que el nuevo líder de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud, asumiera el poder en mayo después de meses de inestabilidad política. El ataque se produce en medio de un aumento en las operaciones militares contra la milicia yihadista y en medio de una grave crisis humanitaria que amenaza con la hambruna a millones de somalís.
Al-Sabab ha librado una guerra de insurgencia mortal contra el frágil gobierno somalí durante 15 años y es uno de los socios más efectivos de al-Qaeda desde que juraron lealtad al entonces líder Ayman al-Zawahiri en 2011. Al-Zawahiri fue asesinado por Estados Unidos a principios de este mes con un ataque de drones.
A principios de este año, el presidente Joe Biden ordenó a las fuerzas especiales regresas al inestable país del este de África, revirtiendo una orden de Donald Trump, su antecesor. Las tropas somalíes han pasado a la ofensiva en las últimas semanas, pero han sido avances limitados. En un sitio web pro al-Sabab, la milicia yihadista afirmó que sus atacantes “habían entrado al Hotel Hayat en Mogadiscio, y estaban disparando al azar dentro del hotel”.
Decenas de personas se habían reunido frente al hotel Hayat, un lugar popular frecuentado por funcionarios del gobierno y somalíes comunes, con la esperanza de descubrir el destino de sus seres queridos atrapados en el interior.
De acuerdo con el portavoz de la policía. Abdifatah Adan Hassan, la explosión inicial fue causada por un atacante suicida acompañado con al menos tres hombres armados. Una segunda explosión ocurrió solo unos minutos después, causando bajas entre los rescatistas y miembros de las fuerzas de seguridad y civiles que acudieron al lugar después de la primera explosión, según el testimonios de personas presentes a la hora del ataque.
Estados Unidos anunció a principios de semana, que sus fuerzas habían matado a 13 milicianos de al-Sabab en un ataque aéreo mientras los yihadistas tacaban a las fuerzas somalíes.
Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, en manos de milicias islamistas y señores de la guerra. Tanto la ONU, como la embajada de Estados Unidos en Somalia han condenado enérgicamente el ataque.
