Por órdenes del alcalde José María Morales, de Ramos Arizpe, Coahuila, los supervisores de transporte público y vialidad de este municipio ordenaron la detención y retiro de un vehículo último modelo que operaba supuestamente con la plataforma Uber, cuando este fue denunciado por taxistas.
En gran parte de los municipios de Coahuila, la CTM y la CROC se aliaron con taxistas para exigir a las autoridades que se actúe en contra de choferes y vehículos que operan como transporte público personal por medio de aplicaciones móviles.
La molestia generalizada de personas usuarias del transporte de alquiler se dio en redes sociales.
Los usuarios de estas aplicaciones señalan que los taxistas no tienen derecho a exigir, puesto que su precario servicio obligó a darle éxito a este modo de transporte local.
Recalcan los usuarios que es más económico, seguro, cómodo y principalmente limpio y de buen trato.
Señalaron a una gran mayoría de taxistas como groseros, irresponsables e insalubres.
