El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó a las 11.00 horas el desfile militar con motivo del Día de la Independencia de México.
Durante su discurso, dio un repaso por el la inicio de la guerra y recordó el martirio y fusilamiento de Miguel Hidalgo, padre de la Patria.
«Con fidelidad a sus principios y valores había hecho lo correcto y lo que era necesario para el bien del pueblo al que se debía. Cuando lo iban a fusilar, a cuatro metros de distancia, los soldados temblaban, le dieron varios tiros sin matarlo y el sargento del pelotón, tuvo que ordenar a dos de ellos que le pusieran las focas de los fusiles directamente en el corazón».
En el estrado, junto a López Obrador y Díaz-Canel, están Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación (Segob); el canciller Marcelo Ebrard, y Claudia Shenbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México. El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, fue el invitado especial del presidente, ambos acompañados de sus respectivas esposas: Lis Cuesta Peraza y Beatriz Gutiérrez Múller.
También se encuentran presentes Arturo Zaldivar, ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Cámara de Diputados.
Previo al discurso, el presidente hizo un llamado a favor de Cuba y pidió al Gobierno de los Estados Unidos que levante el bloqueo.
Destacó que ningún Estado tiene derecho a someter a otro pueblo o país. Incluso citó a George Washington al decir que las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos.
“Dicho con toda franqueza, se ve mal que el Gobierno de Estados Unidos utilice el bloqueo para impedir el bienestar del pueblo de Cuba con el propósito de que este, obligado por la necesidad, tenga que enfrentar a su propio Gobierno”.
