Hirving Lozano resultó noqueado luego de ser empujado por un jugador trinitario y chocar con el portero dónde su cuello sufrió una torcedura cevera.
Recibió un fuerte impacto con la rodilla, se le generó una cortada en la ceja y tuvo que salir en camilla directo al hospital.
Ante está situación el árbitro central no detuvo el encuentro, sino hasta unos minutos después de lo sucedido y esto provoco la ira de los jugadores mexicanos.
Esperemos que no sea una fractura de cráneo o una lesión en las cervicales, pero en unos momentos tendremos la información oficial del cuerpo médico de la selección mexicana.
¡Fuerza Chuky!