Londres, Inglaterra. – (Agencias) Desde que se tiene registro, nunca había hecho tanto calor en las islas británicas y quizá en su historia. Si uno quisiera referirse a un ejemplo del mundo real y antinatural del cambio climático en este momento, sería aquí, en el Reino Unido, que el martes vivió el día más caluroso jamás registrado al llegar a 40.2°C (104°F).
Este pico anormal es un episodio de calor extremo nunca visto en la historia moderna desde que comenzó a llevarse los registros de la temperatura hace siglo y medio. Y probablemente desde 1659, cuando la observación meteorológica se hizo con rigurosa metodología científica. Y, tal vez, mucho más atrás, según el diario estadounidense The Washington Post.
Para los expertos climatológicos británicos, alcanzar los 40°C es un evento “unicornio”, un pico extremo, que había aparecido en sus modelos matemáticos pero que hasta hace poco parecían casi increíbles o difíciles de alcanzar pronto, según escribe The Post.
Ciudades como El Cairo, Karachi, Fénix, son “hornos de primera categoría”, pero ¿Londres?, la ciudad con alta latitud, con su historia registrada que se remonta a los romanos, probablemente nunca había alcanzó la temperatura que experimentaron el martes. Seguramente ningún británico vivo, ni sus tatarabuelos, habían sentido 40°C de temperatura sin viajar al extranjero. La nación no fue construida para soportar calores. Sus hogares, lugares de trabajo, carreteras, vías férreas, hospitales o infraestructura se construyeron para clima templad
Ya el calor de la noche del lunes fue el más alto registrado en la historia de Gran Bretaña de acuerdo con las cifras provisionales, mientras los británicos luchaban por dormir soportando temperaturas por arriba de los 25°C (77°F).
Gran Bretaña tiene algunos de los registros meteorológicos más extensos del mundo, registrados a través de diarios, observación e instrumentos desde la Era de la Ilustración, incluidos registros diarios archivados desde la década de 1770 y máximos y mínimos mensuales que datan de la década de 1660, de acuerdo con el diario The Washington Post.
Hasta el martes, la temperatura oficial más alta fue de 38.7 °C (101.7 °F), registrada en los Jardines Botánicos de Cambridge el 25 de julio de 2019. Casi todas las temperaturas más altas registradas se han producido en los últimos años.
«Estamos absolutamente seguros de que no hemos registrado un día de 40 °C que se remonte a mediados de la década de 1850», dijo a The Washington Post Mark McCarthy, gerente del Centro Nacional de Información Climática de la Oficina Meteorológica, refiriéndose al comienzo de registros de temperatura medidos con el instrumento del servicio meteorológico.
Alexander Farnsworth, paleoclimatólogo de la Universidad de Bristol, incluso estuvo dispuesto a viajar más atrás en el tiempo. “No hay evidencia directa de que el Reino Unido haya excedido los 40°C en los últimos 6,000 años”, dijo a The Post. El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, que representa el consenso autorizado de científicos mundiales, informó en 2021 que, en general y en promedio, la Tierra era más cálida de lo que ha sido en 125,000 años.
De acuerdo con los investigadores del MET (Servicio Meteorológico), “el clima natural” del mundo preindustrial en Gran Bretaña podía tener un día con temperatura de 40°C cada 7,000 años. Hoy en día, esa probabilidad sería cada 100 a 300 años. Según los modelos científicos, para el 2100 un día de 40°C podría ocurrir una vez cada 15 años si los países cumplen el acuerdo de reducción de emisiones de carbón, de continuar con las emisiones contaminantes como hasta ahora sería cada 3 o 4 años.
Según escribió en su blog Simon Lee, un científico atmosférico de la Universidad de Columbia, que nació y se crio en North Yorkshire, Inglaterra, que la idea de 40 °C era una «temperatura aparentemente impensable para un país con una población que envejece y que no tiene aire acondicionado residencial generalizado».
Pero «todo cambió» el 30 de junio, escribió, con la publicación del mapa de un modelo del Sistema de Pronóstico Global Ensemble que “salpicó” con 40°C el sureste de Inglaterra. «Dado que en los días más calurosos anteriores del Reino Unido solo se habían superado los 38 °C muy localmente, esto no se parecía a nada que nadie hubiera visto antes». Los científicos se mostraron inicialmente escépticos. No más.
Hannah Cloke, investigadora de peligros naturales de la Universidad de Reading, le dijo a The Post: «Pensamos que los modelos estaban equivocados», pero hoy estamos «sentados en medio de un clima cambiante». “No tiene precedentes”, dijo, este tipo de pronóstico, “donde podríamos ver y sentir algo que nunca habíamos experimentado aquí”.
