Con 91 votos a favor y 24 en contra, el el Pleno del Senado de la República aprobó las reformas a la Ley de Consulta Popular, para establecerla como un instrumento de participación ciudadana para temas de interés nacional o regional.
De acuerdo a la votación, se determinó si se sigue algún proceso contra los expresidentes, se llevará a cabo el primer domingo de agosto.
Dentro de los temas que no podrán ser objeto de consulta popular se encuentran la permanencia o continuidad en el cargo de servidores públicos de elección popular; temas fiscales y los relativos al Presupuesto de Egresos de la Federación.
La reglamentación establece que los resultados de la Consulta Popular serán vinculantes para los poderes Ejecutivo y Legislativo. En este sentido, los legisladores de oposición advirtieron que la reforma tiene una puerta trasera para justificar los resultados de una consulta al considerar el voto ciudadano en abstención.
