Ontario, Canadá. – (Agencias) Un hombre blanco fue acusado de asesinato de “odio racial”, al lanzar su camioneta el domingo contra los miembros de una familia musulmana, en lo que el alcalde de la ciudad calificó como un “genocidio”.
El ataque, que mató a 4 miembros de la familia y dejó gravemente herido a un niño de 9 años, se suscitó cuando la familia esperaba cruzar la calle en una cálida noche de verano en el condado de Londres, en Ontario.
Las víctimas mortales fue una mujer de 74 años, un hombre de 46, una mujer de 44 y una adolescente de 15 años, el niño de 9 años permanece grave pero estable, con heridas que no ponen en riesgo su vida.
La familia de las victimas pidieron que no se dijeran sus nombres, según informó la policía.
El lunes, Steve Williams, jefe de la policía de Londres, dijo a los periodistas que basándose en la información recogida durante la investigación creían “que este fue un acto intencional y que las victimas de este horrible incidente fueron atacadas”.
«Creemos que las víctimas fueron atacadas debido a su fe islámica».
Por su parte, Paul Waight, superintendente de detectives, informó que fue detenido un sospechoso, Nathaniel Veltman, en el estacionamiento de un centro comercial a menos de dos kilómetros del lugar del ataque “con un chaleco que parecía un chaleco antibalas”.
El sospechoso, un joven de 20 años, fue acusado de cuatro cargos de asesinato en primer grado y un cargo de intento de asesinato.
De acuerdo con Waight, se mantiene el contacto con la Real Policía Montada de Canadá para definir si se debe acusar de terrorismo al sospechoso.
El alcalde de Londres, Ed Holder, ordenó que se izarán a media asta las banderas frente al ayuntamiento durante tres días en señal de luto.
«Permítanme ser claro: este fue un acto de asesinato en masa, perpetrado contra musulmanes, contra londinenses, y arraigado en un odio indescriptible», dijo. “La magnitud de tal odio puede hacer que uno se pregunte quiénes somos como ciudad y quiénes somos como londinenses».
Justin Trudeau, primer ministro, expresó en un tuit que estaba “horrorizado con la noticia”,
«A la comunidad musulmana en Londres y a los musulmanes de todo el país, sepan que estamos con ustedes», escribió. «La islamofobia no tiene cabida en ninguna de nuestras comunidades. Este odio es insidioso y despreciable, y debe cesar».
Según Waight, no existía ninguna conexión hasta ahora conocida, entre la familia y Veltman. Se negó a responder si había admitido el ataque. Hasta el momento no se sabe si Veltman pertenece a “algún grupo o milicia de odio racial”.
El Servicio de Inteligencia de Seguridad canadiense (SIS), la agencia de inteligencia del país, había advertido en un informe ´presentado en abril, que la pandemia de coronavirus había “exacerbado las narrativas xenófobas y anti-autoridad”.
Citó, además, “el extremismo violento por motivos ideológicos”, que incluye la violencia por motivos raciales, como una amenaza creciente.
