Rio de Janeiro, Brasil. (Agencias) El presidente de extrema derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, enfrenta una nueva crisis que se suma a la ola de muertos por Covid-19, más de 3,700 diarios.
Renuncian los tres responsables de las fuerzas armadas de Brasil: tierra, mar y aire, después de que el lunes, Bolsonaro despidiera al ministro de Defensa.
Una crisis en su ya deteriorada administración, que se suma a la presión de una oleada de muertes imparables por la pandemia del coronavirus.
El promedio de muertes por Covid-19 se ha casi cuadruplicado desde enero de este año hasta más de 3,800 por día, lo que ha puesto al borde del colapso a los hospitales.
Todos estos movimientos en el gobierno de Bolsonaro se dieron en la víspera del día más importante para la extrema derecha brasileña: el aniversario del golpe de estado del 31 de marzo de 1964.
Este golpe dio paso a una dictadura que se prolongó 21 años, y que Bolsonaro, capitán retirado, lo ha enaltecido permanentemente como un modelo.
El lunes, Bolsonaro cesó a los ministros de Relaciones Exteriores, de Justicia y de Defensa, a su jefe de gabinete., al fiscal general y al Secretario de Gobierno. Y, también, nombró a su cuarto ministro de Salud.
El ahora ex Secretario de Defensa, Edson Leal, había rechazado públicamente la politización de los militares brasileños y había establecido restricciones más duras contra el coronavirus. Bolsonaro había exigido su destitución.
Bolsonaro ha sido uno de los presidentes que han hecho público dudas sobre las vacunas y minimizado la importancia de la pandemia.
El presidente del Brasil defendió medicamentos no probados como tratamiento, aunque la semana pasada tuvo que dar marcha atrás y dijo que, haría de 2021 el año de las vacunas.