Internacional

Desokupa, la forma intimidante de bancos y propietarios en Cataluña

"Hay que irse. Si no lo haces voluntariamente, va a ser por la fuerza", amenazó

Barcelona, Cataluña. – (Agencias) Sara -un nombre ficticio, porque su caso sigue abierto, fue desalojada a finales de marzo. Sin posibilidad económica de alquilar un piso, no encontró otra solución para sobrevivir que ocupar un piso vacío en el barrio del Poble Sec de Barcelona.

No tenía a dónde ir. Hace unos días, comenzó a detectar la presencia de jóvenes fuertes, musculosos y con estética militante fuera del edificio.

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Temía que fueran miembros de Desokupa, el grupo de extrema derecha que trabaja para bancos, fondos buitre y todo tipo de propietarios, desalojando pisos ocupados.

Y así pasó. Unos días más tarde, un hombre se presentó en la puerta del piso como abogado que representaba a la propiedad. 

«Hay que irse. Si no lo haces voluntariamente, va a ser por la fuerza», amenazó. Cuando se fue, dejó un pedazo de papel pegado a la puerta con la publicidad de Desokupa y un número para ponerse en contacto.

«Ahora mismo se siente intimidada por la presencia de estas personas. Por eso hay compañeros sindicales que se van a dormir con ella todos los días. Siempre que esto sucede, hay que compartirlo y juntos nos organizamos para que la persona afectada no esté sola», explica María, miembro de la Unión Vecinal del Poble Sec. 

Días después, se le acercó en la entrada del edificio y la amenazaron de nuevo con los mismos términos: «Estúpida sentadilla, será si lo quieres o no».

En su última visita, le ofrecieron dinero para irse, y le prometieron que le darían la cantidad que había pagado para entrar en el piso.

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Hay mafias que ocupan bloques de pisos, cambian sus cerraduras y luego revenden las llaves a personas necesitadas. Sin embargo, este no es el caso de Sara.

«La oferta de dinero es el segundo paso que dan. Pero las familias saben que no importa cuánto dinero les den, esto no resolverá el problema de la vivienda; por este motivo casi nadie acepta recibir dinero», explica Santi Mas de Xaxàs, portavoz de PAH Barcelona.

Alega que el modus operandi de Desokupa se basa en la extorsión, la amenaza y la violación de la ley. «Si no les pagas, empiezan con las amenazas, dicen que te van a desalojar, te van a obligar a ti y a tus hijos a salir», dijo. “Se trata de intimidar, básicamente».

Entrevista: Santi Mas de Xaxàs (PAH) | betevé
Santi Mas de Xaxàs

Si eso tampoco funciona, suceden con lo que Desokupa llama control de acceso. «Se colocan en la entrada de la finca y te dicen que si no vives ahí, no puedes pasar. Como esto no se puede hacer, porque es una práctica ilegal, los grupos de vivienda se movilizan y notifican a la policía cuando sucede».

Si logran saber que el piso está vacío, dibujan la puerta y retiran las pertenencias de los ocupantes.

En los casos más extremos, la APH ha detectado la presencia de miembros de Desokupa que viven dentro del bloque, desde donde pueden intimidar más directamente a los ocupantes cortando agua, electricidad o alterando la convivencia para que intervengan los Mossos.

El objetivo es echar a la gente del piso antes de que intervenga la justicia, lo que en muchos casos puede tardar meses antes de ordenar el desalojo. De esta forma, el propietario se ahorra el coste del proceso judicial y se recupera ante un inmueble del que quiere obtener un beneficio económico.

Hasta hace poco, los bancos y los grandes inquilinos estaban en peligro de que el desalojo no llegara nunca y que el juez les ordenara ofrecer alquiler social. Sin embargo, el Tribunal Constitucional anuló algunos puntos de la ley de vivienda, incluidas las disposiciones de este supuesto para los pisos ocupados.