El Cairo, Egipto. – (Agencias) Después de una prolífera carrera como escritora y una incansable lucha por los derechos de la mujer, que la llevó a la cárcel y al exilio, la pensadora feminista y socialista más destacada del siglo pasado en Egipto, Nawal al Saadawi, ha muerto a la edad de 89 años.
La prensa del país informó su muerte este 21 de marzo, tras una enfermedad que no ha sido establecida con precisión, en un hospital de la capital donde residía desde poco más de una década y donde ofrecía conferencias y charlas sobre sus obras.
Su figura mostrada sin maquillaje y sin teñir su pelo blanco, reivindicaba el papel de la mujer en su más natural expresión. Era una dura crítica contra el patriarcado egipcio y contra el capitalismo.
Sus raíces
Nacida en el seno de una acomodada familia egipcia en la pequeña localidad de Kafr Tahla, en el Delta del Nilo, en 1931. Ahí empezó a desarrollar s pensamiento y escribió sus primeros textos feministas al darse cuenta de la discriminación a la mujer frente a los hombres en su colegio.
De acuerdo con su biografía, Al Saadawi empezó a escribir a los 13 años en un diario que guardaba debajo de su cama y desde entonces no abandonó la pluma.
Ni la persecución ni la cárcel en la década de los ochenta en el Siglo XX, ni su exilo a principios del Siglo XXI, la hicieron desistir.
Con la especialidad en psiquiatría, fue directora general de ese departamento en el Ministerio de Salud desde donde fundó la revista “La Salud”.
En 1969, escribe su primer libro “Mujeres y Sexo”, una de las obras más controvertidas de su producción literaria. Analiza el miedo de la sociedad hacia el cuerpo de la mujer y el permanente intento de controlarlo bajo pretextos religiosos o políticos.
Por su libro, además de ser censurado en Egipto, Al Saadawi fue despedida de su trabajo y fue clausurada la Asociación de Cultura Sanitaria que fundó.
«Todo ello por atreverme a escribir sobre las desgracias privadas y públicas, corporales e intelectuales de las mujeres», según relata en uno de sus libros.
Fue acusada de “crímenes contra el Estado” y encarcelada en 1981, después de escribir una dura crítica al régimen del expresidente Anwar al Sadat y al sistema capitalista.
Ahí, escribió la que sería su novela más destacada, “La caída del Imán”, que denunciaba cómo los hombres utilizan la religión, la política y la moral para controlar a las mujeres. Hasta el día de hoy, continúa prohibida en Egipto.
Muchas de sus obras han sido traducidas a varios idiomas y adaptadas en películas u obras de teatro en Francia, Reino Unido, Holanda, Australia, Italia, Noruega o Senegal.
Al Saadawi tuvo que salir de Egipto en los años noventa hacia los Estados Unidos, tras recibir constantes amenazas de grupos radicales islamistas. Ahí, impartió clases en universidades y creó la asignatura “Creatividad y Disidencia”.
Regresó a Egipto poco antes de que estallara la revolución que en 2011 derrocó al exdictador Hosni Mubarak, participó en las protestas prodemocracia, y en los últimos años se dedicó a seguir difundiendo su pensamiento feminista.
