Internacional

El ¡Basta Ya!» del campo español resuena en Madrid 

Manifestantes de toda España llegaron a la capital en unos 1,500 autobuses, acompañados de tractores y animales, para decir "basta ya"

Madrid, España. – (Agencias) El grito desesperado de “¡Basta Ya!” del campo español resuena en las calles de Madrid. Entre 100,000 agricultores y ganaderos, según la Delegación del Gobierno, y 400,000 según los organizadores, han pedido al Gobierno ayudas urgentes y «un plan de choque«.

Los altos costos, agravados por la guerra en Ucrania, y la baja rentabilidad, ponen en peligro su supervivencia. Las organizaciones agrarias denuncian que los precios de los combustibles se han triplicado y los de los fertilizantes se han cuadruplicado. La escasez de cereales para los piensos complica más las cosas.

Unas 150.000 personas en la manifestación del campo contra el Gobierno:  "Nos estamos arruinando"

«Nos cuesta el pienso seis veces, siete veces más que en los últimos cinco años. Esto no hay quién lo resista. El gasoil no podemos ni pagarlo. El campo está en un deterioro absoluto. Nadie nos escucha. Y da lo mismos el Gobierno que esté: ha estado la derecha, ha sido una ruina, y están los de la izquierda y ya no le quiero ni contar. El campo no entiende de ideología, el campo lo que entiende es de trabajo», explica Miguel Ángel Rodríguez, agricultor y ganadero.

«Lo primero que le pedimos al Gobierno como medida urgente es que anule los impuestos al gasoil y a la gasolina para que nuestros productos puedan llegar a los mercados de una manera más rápida y económica», dice Isabel De La fuente, ganadería Castro Cobaleda.

«Basta ya»

El sector rural español realizó una multitudinaria manifestación en Madrid  en defensa del campo - Monitoreamos

Manifestantes de toda España llegaron a la capital en unos 1,500 autobuses, acompañados de tractores y animales, para decir «basta ya».

A los citados problemas, se suman la persistente sequía y la huelga indefinida de camioneros, por los desorbitados precios de los carburantes. Los principales afectados: productores de leche, frutas y hortalizas.