Religión

El Evangelio de hoy 22 de Junio: “Todo árbol bueno da frutos buenos y el árbol malo da frutos malos”

Del santo Evangelio según san Mateo: 7,15-20

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Cuidado con los falsos profetas. Se acercan a ustedes disfrazados de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conocerán. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los cardos?
Todo árbol bueno da frutos buenos y el árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede producir frutos malos y un árbol malo no puede producir frutos buenos. Todo árbol que no produce frutos buenos es cortado y arrojado al fuego. Así que por sus frutos los conocerán». 


Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.

REFLEXIÓN

Hay hermanos a los que les gusta «aparentar» y hacerse pasar como personas muy piadosas mediante actos puramente externos, siendo que estos actos externos deben ser un claro reflejo de lo que se vive interiormente. 

El cristianismo, por el hecho de ser un estilo de vida centrado en el Evangelio, no puede ser disimulado. Los frutos, es decir, lo que emerge naturalmente de la persona en situaciones cotidianas, manifiestan en realidad lo que se es. Si somos cristianos, esto se debe notar en nuestra manera de vestir, de hablar, de reaccionar y, sobre todo, de amar y servir. 

Nuestro trato diario con las personas con las que convivimos, debe estar impregnado del «buen aroma de Cristo»; nuestra solicitud para ayudar a los necesitados, debe ser movida, no por intereses personales, sino por compasión, como quien ve en el hermano necesitado, al mismo Jesús que dijo: «Cuando lo hiciste por uno de mis hermanos lo hiciste por mí»; nuestra apariencia diaria debe manifestar que somos templo del Espíritu. Si verdaderamente eres discípulo de Jesús, deja que él se transparente en tu vida siendo congruente entre lo que crees y lo que vives.