Madrid, España. – (Agencias) Utilizando el aniversario de la Constitución, a principio de este mes, 271 exoficiales de las fuerzas armadas españolas emitieron una comunicado criticando al gobierno socialista y amenazando con “fusilar a los izquierdistas”.
El manifiesto fue publicado después de filtrarse las conversaciones de los exoficiales, en una reunión privada, a los medios de comunicación españoles.
Entre los nombres conocidos que han firmado el documento, figura el comandante Ricardo Pardo Zancada, condenado a 12 años de cárcel por su participación el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981.
Otra de los firmantes es el exgeneral de división Juan Chicharro, que preside la Fundación Francisco Franco y al que el PP cesó como vocal de la Orden de San Hermenegildo tras un discurso en el que justificaba una intervención militar.
Los oficiales retirados de la fuerza aérea, según The New York Times, alabaron al dictador Francisco Franco calificándolo como “el insustituible” y pusieron el pulgar hacia arriba en la sugerencia de “fusilar a los españoles de izquierda”.
Algunos de los exoficiales también enviaron a Felipe VI una carta atacando al gobierno de Pedro Sánchez, el presidente socialista de España.
El Ministro de Defensa de España y jefes de las fuerzas armadas, dijeron que las opiniones no representan la opinión de los militares en activo.
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Sin embargo, la declaración preocupó a los analistas y llevó al gobierno a emprender acciones legales. Francisco Franco gobernó a España cerca de 40 años, bajo el lema “Orden y Dios” asesino a miles de opositores.
La semana pasada, el medio Público había mostrado capturas de pantalla de otro chat en WhatsApp que habían filtrado, en el que miembros en activo de una unidad de artillería compartiera saludos fascistas y comentarios amenazantes.
Por su parte, la ministra de Defensa, Margarita Robles, envío el contenido de los chats a la fiscalía general para definir si se había cometido algún delito o violaciones a la Constitución.
El jefe del Estado Mayor, general Miguel Ángel Villarroya Vilalta, reafirmó “la neutralidad política de nuestras fuerzas armadas” en un comunicado y advirtió que los mensajes personales inapropiados “perjudicaban la imagen de las fuerzas armadas”, incluso si procedían de exoficiales.
«Las opiniones de estas personas no pueden ser consideradas como representadas al colectivo al que pertenecieron alguna vez», dijo.
Para el exjuez del Tribunal Supremo español, José Antonio Martín Pallín, no existe motivo para enjuiciar el contenido de una charla privada, pero si justificó el retiro de la Orden de San Hermenegildo de los involucrados, porque “esta orden requiere un comportamiento ejemplar”.
La Casa Real remitió las cartas enviadas a Felipe VI al gobierno. Para Martín Pallín, “el rey debería haber dicho públicamente algo contundente contra esta misiva».
Agregó, “me queda claro que ahora hay oficiales en servicio que defienden los valores antidemocráticos, incluso si no estoy diciendo que sus puntos de vista son compartidos por todo el ejército».
Sin embargo, hay una creciente ola de extrema derecha en las fuerzas armadas de varios países cuyo pasado esta marcado por las dictaduras, como Alemania.
Coincide con el impulso de los gobernó de restringir los derechos individuales, como la libertad de circulación, debido a la pandemia.
José Ignacio Domínguez, un ex oficial de la fuerza aérea que se negó a firmar la carta que sus compañeros habían preparado para el rey Felipe, dijo que era un intento «conseguir que nuestro rey interviniera y ayudara a derrocar al gobierno».
Luis Gonzalo Segura, ex teniente del ejército y denunciante de la corrupción en el ejército, dijo que los mensajes intercambiados por los exoficiales dejaban claro que «lo único que les impedía pedir un golpe de Estado es que esto no sería visto favorablemente por la población española y se opondría por el resto de Europa».
El chat filtrado por ex oficiales de la fuerza aérea pidió el fusilamiento de «26 millones de hijos de puta», una aparente referencia a la población española que, según ellos, son izquierdistas.
