Opinión

El PAN ya fue.

Fueron  15 senadores, 2 diputados locales y  un diputado  federal del PAN, los que apoyaron la iniciativa y se han suscrito la Carta de Madrid, un manifiesto de la ultra derecha española contra el comunismo. 

Inmediatamente la presidencia del partido comunicó que esa reunión fue a título personal y que no tiene nada que ver con Accion Nacional.  

Invariablemente esta reunión termina en desastre  para un partido que cada día cava más hondo su pozo. Es la identidad lo que ha perdido el panismo en los últimos años, luego vienen sus representantes a intentar imitar estrategias de polarización que solo confirman que existe un hueco infinito, precisamente de identidad.  

Los panistas no han entendido nada, son ciegos ante la realidad de que su fuerza esta disminuida.  

Específicamente en Coahuila el líder, Chuy de León,  es incapaz de ver lo profundo que ha enterrado a su partido. Esta plácidamente dormido y se deja susurrar al oído que todo esta bien, negándose a  ver números y estadísticas  desastrosos que le bailan en la nariz. Ahí déjenlo, no lo despierten. 

El mal gusto de Ebrad. 

El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard,  informó que México recibirá  este  mes 4 millones 600 mil dosis de AstraZenca y 1 millón 750 mil de Moderna que comprometió Estados Unidos a nuestro país, en pocas palabras son vacunas regaladas para que podamos salir con prontitud de la pandemia.  

Luego, en la misma conferencia, anuncia  que nosotros enviaremos esta semana  300 mil dosis de vacunas de AztraZeneca a Honduras y Bolivia.  

¿Cómo es posible que regalemos lo que necesitamos con urgencia? Sumándole el mal gusto de regalar lo regalado. Es absurdo que el gobierno mexicano  se levante el cuello apoyando a naciones “necesitadas”, cuando estamos en la misma posición estirando la mano para que una verdadera potencia nos de lo que le sobra.  

Por lo menos si ya estamos en la postura de agarrar lo que caiga,  deberíamos aprovecharlo al máximo y avanzar en lo posible en nuestro territorio… dirían en redes “En fin, la hipocrecia”.