Berlín, Alemania. – (Agencias) Europa enfrenta una crisis de gas que ha llevado a un aumento del 30% en el precio del combustible, golpeando fuertemente los bolsillos de los hogares europeos y aumentando la preocupación sobre el suministro de este vital energético.
El suministro del gas a Europa, que llega generalmente por Siberia, continua su flujo hacía el este del continente por 15º día consecutivo. Rusia negó repetidamente el uso de los vastos recursos de gas como chantaje, después de que el gasoducto Yamal-Europa invirtiera el flujo tres días antes de Navidad.
Los volúmenes hacia el este, a través del oleoducto Yamal-Europa, alcanzaron casi 9.9 millones de kWh / h en el punto de medición de Mallnow, en la frontera germano-polaca, el martes por la mañana de acuerdo con los datos, frente a los 5.8 millones de kWh /h anterior.
Vladímir Putin, presidente de Rusia, dijo el mes pasado que Alemania revende el gas ruso a Ucrania y Polonia, en lugar de aliviar la presión sobre los precios, culpando a los importadores alemanes de la reversión del flujo y el aumento de los precios. El gobierno alemán se negó a comentar la declaración de Putin.
Europa ha estado en el centro de la crisis del gas desde el año pasado, cuando el levantamiento de restricciones del Covid elevó la demanda sobre las reservas agotadas del gas natural. Los precios de referencia se han más que quintuplicado desde enero de 2021, afectando a los consumidores y a las empresas, poniendo en riesgo la recuperación postpandemia, de acuerdo con el medio inglés The Guardia.
Los proveedores del energético en el Reino Unido han advertido que los precios promedio facturados podrían subir a más de 2,000 £ (unos 55,580 pesos) al año, a partir de abril, cuando se revise el tope de los precios, presionando al gobierno a establecer medidas que permitan reducir el precio en medio de un alza al costo de la vida.
De acuerdo con un operador, las expectativas de un clima más frieron estaban contribuyendo a los aumentos de los precios, sin embargo, fueron los bajos flujos del gas ruso el principal impulsor del alza.
Por otra parte, los países de la OPEP+ acordaron seguir adelante con los planes de aumentar la producción. El optimismo del mercado significa que la variante ómicron tendrá un impacto a corto plazo en el crecimiento global.
La OPEP+, la alianza de 23 países productores encabezados por Arabia Saudita, y a Rusia como no miembro, se apegó a un modesto aumento de la producción de 400,000 barriles para el próximo mes de febrero.
El aumento, forma parte de una reducción gradual a los recortes en la producción de 10 millones de barriles por día acordado en 2020, cotizando un 2% arriba de los 80 dólares por barril el martes. Estados Unidos había instado a la OPEP y a sus aliados, lidereados por Rusia, a aumentar la producción para ayudar a mantener el control sobre los precios con el fin de no amortiguar la incipiente demanda del combustible y ralentizar la recuperación.
Aunque la OPEP y socios no aumentaron como Estados Unidos quería, cualquier aumento en el volumen de extracción de crudo, indica confianza en que Ómicron no está causando que la demanda de combustible se desplome.
En un informe técnico, la OPEP dijo que la variante sería «leve y de corta duración» y se mostró optimista sobre las perspectivas económicas.
«Esto se suma a una perspectiva económica estable tanto en las economías avanzadas como en las emergentes», dijo el informe del comité técnico conjunto.
