Ankara, Turquía. – (Agencias) El enfrentamiento entre el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha pasado al plano económico.
Erdogan convocó al mundo árabe a boicotear los productos franceses en respuesta a las declaraciones de Macron sobre el extremismo islámico.
El separatismo islámico es un peligro para Francia había declarado Macron. Erdogan respondió con un llamado a los musulmanes a boicotear a Francia.
Varios países musulmanes se han sumado a la convocatoria de Erdogan y han tomado acciones contra productos franceses.
Compañías islámicas como Wajbah Dairy de Qatar, que ha prometido encontrar alternativas a los productos franceses, o Al Meeram Consumer Goods Company, que ha anunciado que está retirando de sus sucursales los productos franceses de manera inmediata hasta nuevo aviso.
Arabia Saudita, por su lado, ha hecho un llamamiento para que los saudíes eviten comprar en la cadena francesa de autoservicios Carrefour. Y en Kuwait, más de 400 agencias de viajes han eliminado de sus oferta los viajes a París.
Esto le ha salido caro a Turquía. Los temores de los inversionistas ante este nuevo enfrentamiento, han hecho que se la lira turca se devaluara el pasado 26 de octubre a un mínimo histórico más allá de 8.05 frente al dólar y más de 9.5 frente al euro.
En el caso de los bonos del Gobierno de Turquía en dólares, cayeron hasta 1.4 centavos, mientras que el principal índice de acciones de Estambul cayó un 1.2%.
Por su parte, Francia ha reaccionado con cierta tranquilidad al boicot. El movimiento de Empresas de Francia (Mouvement des Entreprise de France o MEDEF) ha convocado a su vez a las compañías a mantenerse firmes.
«No respondamos a las estupideces con estupideces (…). No es cuestión de boicotear a nadie, es cuestión de ceñirse a nuestros valores republicanos», declaró el presidente del Medef, Geoffroy Roux de Bézieux.
La reacción de Francia se debió al terrible asesinato del profesor Samuel Paty a manos de un musulmán checheno, que lo decapitó al grito de “¡Ala es grande!” (¡Allahu Akbar! en árabe). Paty había enseñado una caricatura publicada en la revista Charlie Hebdo de Mahoma, durante la clase de libertad de expresión.
A principios de Octubre, macron anunció su intención de sacar adelante una ley contra el separatismo islámico y en favor de “consolidar los principios republicanos”.
Las tensiones que esto provocó entre Ankara y París se agudizaron tras el discurso de Macron contra el extremismo islámico.