Nueva York, EUA. – (Agencias) La celebración de los partidarios de Biden estalló en las calles de Estados Unidos. En Nueva York y Filadelfia, lo mismo que en Los Ángeles o Chicago, las celebraciones mostraron la cara de la victoria después de una fragorosa batalla.
Después de cuatro largos días de espera, los partidarios de Biden salieron a las calles de las grandes ciudades a celebrar este sábado en la mañana, cuando los medios electrónicos dieron la proyección del conteo de votos de Pensilvania con una ventaja para el exvicepresidente imposible de perderla.
En Nueva York, comenzó como un murmullo bajo que sonaba como un ruido de una lejana multitud. En Chicago, sonaban cencerros y se golpeaban ollas y sartenes. En Louisville, Kentucky, donde los manifestantes han llegado a las calles semanalmente desde la muerte de Breonna Taylor, la gente también se reunió, esta vez de júbilo.
Afuera del Trump International Hotel, en Washington, D.C., una ciudad donde el 95% votó por Biden, sonaban los claxon, los gritos agudos, el oleaje de los estéreos de los coches escuchando “no no no no, he y he y he y, adiós».
La alegría fue particularmente mayor en las ciudades que meses antes vieron vivieron oleadas de protestas por la brutalidad policial y el racismo sistémico, en las que Trump y sus políticas eran blanco de constantes protestas.
«Me siento increíble, me siento en paz, siento que mi esperanza no se ha perdido», dijo Nicole Hayden, de 38 años, en Louisville. «Necesitábamos esto.»
Hayden es una de muchas personas que se reúnen en el Jefferson Square Park, donde los manifestantes han mantenido durante meses un monumento a Breonna Taylor, una mujer afroamericana de 26 años que fue asesinada por la policía durante una redada en su apartamento.
Hayden dijo que la victoria de Biden le dio una razón para estar optimista.
«Hemos estado aquí luchando por la justicia para Breonna Taylor por tanto tiempo, y sólo necesitábamos un poco de esperanza», dijo.
En Chicago, Demoz Desta, de 29 años, emergió de una tienda de comestibles, aturdido por la repentina conmoción. «Pensé que los Cachorros habían ganado la Serie Mundial por un segundo», dijo. «Esto se siente tan bien ver a todos tan felices.»
Las calles de la ciudad de Nueva York estaban llenas del sonido de la gente golpeando ollas y sartenes, en lo que se sentía como un eco de la alegría nocturna para los trabajadores médicos de primera línea que comenzaron en la primavera, cuando la ciudad era el epicentro de la pandemia de coronavirus. Un hombre abrió una botella de champán en medio de una manzana de Brooklyn.
Sin embargo, no todos en la ciudad parecían compartir la emoción. En una obra de construcción en Manhattan, los trabajadores miraban sus teléfonos con un toque de decepción. Otros se alejaron sacudiendo la cabeza con incredulidad.
«En mi sitio de trabajo estaban muy decepcionados porque no gano él», dijo John Rodin, de 25 años. «Todo el mundo quería a Trump».
Desde Minneapolis hasta Louisville, Filadelfia y Washington D.C., ciudades de todo el país que vivieron disturbios civiles después de la muerte de Floyd, una vez más, la gente tomó las calles, esta vez para celebrar.
«Siento que hoy hemos dado un puñetazo en la cara», dijo un orador en Minneapolis, mientras la multitud estallaba en vítores salvajes. «Pero nuestro trabajo no está hecho aún».
A través de la multitud, la gente aplaudió a docenas de causas diferentes, incluidos los derechos humanos, los derechos de vivienda y la justicia ambiental.
Aunque los oradores dejaron en claro que estaban contentos de que Biden había derrotado a Trump, pero también dejaron en claro que esperaban que Biden cumpliera. «No podemos olvidar que nuestros líderes electos trabajan para nosotros», dijo un orador.
