Ámsterdam, Países Bajos. – (Agencias) Europa se ha convertido en el centro de la pandemia de la nueva variante, la ómicron. Lo que ha obligado a los países a establecer medidas más radicales para contener el avance de los contagios. Reino Unido ha establecido más restricciones para los pasajeros que llegan al país, Francia ha establecido la vacunación obligatoria a los trabajadores de la salud e Italia a impuesto de nuevo el confinamiento.
Ahora tocó a los Países Bajos. El primer ministro, Mark Rutte, anunció este sábado que a partir del domingo se cerrarán los bares, restaurantes y lugares no esenciales hasta el próximo 14 de enero como medidas para contener la propagación de la contagiosa variante ómicron que domina a todo Europa.
El Instituto Nacional de Salud Pública de los Países Bajos ha registrado casi tres millones de casos de Covid-19 desde que comenzó la pandemia, y más de 20,000 muertes.
Por su parte el Reino Unido ha notificado más de 10,000 casos de la nueva variante, lo que supone el mayor aumento hasta la fecha. El número total de infecciones por Covid-19 ha superado las 90,000 por segundo día consecutivo.
Los datos son especialmente críticos en Londres…»Estamos increíblemente preocupados por el enorme aumento de la variante ómicron (…) Los ingresos hospitalarios están aumentando, pero también las ausencias del personal están subiendo a niveles masivos, por lo que he tomado la decisión, en consulta con nuestros socios, de declarar hoy un incidente grave», explicaba el alcalde de la ciudad Sadiq Khan.
Cientos de personas hacían cola en la estación londinense de St. Pancras el sábado por la mañana, en la terminal de Eurostar de la estación, ante la entrada en vigor de nuevas restricciones por coronavirus para los viajeros del Reino Unido.
A partir del sábado, los ciudadanos británicos no podrán entrar en Francia por motivos no esenciales, y todos los viajeros tendrán que presentar una prueba reciente del virus con resultado negativo y estar en cuarentena a su llegada.
