Matanzas, Cuba. – (Agencias) Tras dos días de combatir el incendio de los dos tanques de almacenamiento de combustible en Matanzas, en Cuba, desde el viernes pasado, una espesa columna negra de humo sigue alzándose y esparciéndose en el aire. Pero la noche del domingo, el cielo se ilumino con un tono naranja espeluznante después de que explotara el segundo tanque de combustible en las instalaciones petroleras, produciendo la huida de la gente y el temor de más víctimas.
De acuerdo con el recuento de las autoridades hasta el lunes en la mañana, 125 personas han resultado heridas, 17 bomberos se encuentran desaparecidos y un oficial, de los primeros que atendieron la explosión, fallecido. De los heridos, 24 permanecen hospitalizados, 5 en estado crítico.
Todo comenzó al viernes pasado, a las 7 p.m., cuando un rayo cayó en un tanque de almacenamiento de combustible en las instalaciones de los superpetroleros en Matanzas, en el noroeste de la isla y a uno 88 kilómetros de la capital La Habana, produciendo una enorme explosión. Las llamas se extendieron rápidamente a otro de los tanques, lo que provocó más explosiones. De acuerdo con el gobernador de Matanzas, Mario Sabines Lorenzo, se tuvieron que evacuar a unas 5,000 personas que habitaban cerca de la zona.
De acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas de Cuba, el domingo empeoraron los fuertes vientos lo que avivó la conflagración. Al caer la noche en la isla, el segundo taque que ardía explotó y colapso, lanzando aceite hirviendo y en llamas a la vegetación circundante e incendiando un tercer taque vecino. La conflagración hirió a un reportero y a un empleado del Sindicato de Petróleos de Cuba, la compañía estatal de petróleo.
Sabines Lorenzo desmintió que el tercer tanque hubiera colapsado, como se había informado en medios, y dijo que ahora “estaba en riesgo” de ser consumido por las llamas. Agregó que los bomberos estaban tratando de cortar el camino del incendio. Mientras tanto, los trabajadores y los habitantes de la zona, así como los servicios de salud fueron retirados.
Las escenas de los videos subidos a las redes mostraban una gran bola de fuego que se expandía en el aire, mientras la gente gritaba “¡Oh! ¡Dios mío!”, mientras se retiraban de los balcones o ventanas desde donde grababan.
“En este momento la situación es muy compleja en la Base de Superpetroleros de #Matanzas. Las explosiones continúan ocurriendo. No se puede acceder al lugar”, tuiteó el Ministerio de Energía y Minería la madrugada del lunes.
Las tormentas eléctricas que se formaron durante el fin de semana elevaron el riesgo de lluvias tóxicas , advirtió el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba. La agencia gubernamental también sugirió el uso de cubrebocas para evitar la inhalación de partículas peligrosas.
El incendio generó los ofrecimientos de ayuda de países como Venezuela, México, Chile, Rusia, Nicaragua y Argentina, a la que agradeció el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel. El mismo viernes, cuadrillas de Venezuela y México arribaron a la isla.
Todavía no está claro cuánto petróleo se perdió en el fuego, pero para muchos, la escena que produjo fue increíble. “Parece un campo de batalla. No me creo ni lo que ven mis ojos”, dijo un matancero al periodista Mario J. Pentón, periodista de AmericaTeve.