Cultura

Filosofía del poeta, Eduardo Lizalde

SOCRÁTICOS Y ABERRANTES
¿Cómo sabemos que esta seductora,
esta criatura indescriptible,
es una bella moza de verdad,
un ejemplar genuino de perfecta,
de única hermosura,
si no sabemos qué es lo bello en general?
No es el saber, Hipias gracioso,
el que permite con certeza y hielo
descubrir la carnosa, incierta luz de tal ternura:
un tenso muslo, un pecho que levanta,
una dulce entrepierna,
esta grupa apretada,
el arca de este cuerpo, un rostro que deslumbra.
Es el feliz dolor que ellos producen, sin saberlo,
en fibras, vísceras ocultas,
líquidos de adánica inocencia.
El Universo es hueco, está vacío.
No existen los modelos superiores, Hipias.
Sólo existe esta beldad o aquélla.