Bruselas, Bélgica. – (Agencias) A pesar de los intentos de los eurodiputados de derecha de debilitar el objetivo, el Parlamento Europeo aprobó por mayoría el fin de la venta de vehículos de gasolina y diésel para el año 2035. Después de un intenso día de votaciones sobre un conjunto de leyes que forman parte del acuerdo verde de la Unión Europea, la principal respuesta del bloque comunitario al grave problema del cambio climático, los europarlamentarios celebraron una gran victoria en la lucha contra el cambio climático.
Para Pascal Canfin, un eurodiputado centrista francés y presidente del Comité de Medio Ambiente del Parlamento Europeo, poner fin a la venta automóviles con emisiones distintas a cero fue “una decisión histórica que nos llevará a una nueva era de neutralidad climática. Es un gran logro”.
Los parlamentarios europeos toda vía tendrán que negociar la ley con los 27 gobiernos socios. Sin embargo, el acuerdo verde aprobado en la sesión del miércoles pone presión a los jefes de estado de estos países para ponerle fin a los motores de combustión interna en el mercado de la UE de 447 millones de personas. Los eurodiputados rechazaron una pretendida enmienda de los parlamentarios europeos de derecha, que excluiría al 10% de los vehículos de la ley.
Poco más temprano, después de que los eurodiputados votaron en contra de una propuesta de revisión del sistema europeo de comercio de emisiones (ETS), que tenía como objetivo frenar la contaminación de las centrales eléctricas y las fábricas, siguieron las reclamaciones y el alboroto. Los eurodiputados verdes y socialdemócratas votaron en contra del texto de la ETS argumentando que habían “prevalecido sobre la alianza fósil”. La centroderecha europea los acusó de ponerse de lado de la ultraderecha anticlimática.
El rechazo causo el aplazamiento de dos votaciones vinculadas: un controvertido impuesto fronterizo al carbón que impondría costos a las importaciones extranjeras de hierro, acero, cemento y otros productos contaminantes; así como, “un fondo social para el clima”, cuyo objetivo es proteger a los hogares más pobres del costo de las mejoras en la eficacia energética.
Las leyes aprobadas ahora se enviarán de vuelta al Comité del Medio Ambiente del Parlamento Europeo, el encargado de encontrar un compromiso entre los grupos políticos. Las tres leyes forman parte de una respuesta más amplia de la UE a la crisis climática, con el objetivo de reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero en un 55% a finales de la década.
Pascal Canfin, prometió que la búsqueda de un compromiso comenzaría de inmediato. “Este trato podría hacerse esta tarde, podría hacerse en dos semanas, podría hacerse en julio, no lo sé todavía. Eso es lo que vamos a empezar a discutir”, dijo.
