Gaza, Territorio Palestino. – (Agencias) En esta cuarta guerra entre Hamás y las fuerzas israelitas, las milicias del grupo armado han disparado cerca de 4,000 cohetes sobre Israel, algunos incluso golpearon muy adentro del país.
A pesar del escudo antiaéreo “Cúpula de Acero” de Israel, que ha interceptado el 90% de los cohetes lanzados por Hamás, los lanzamientos de los milicianos son cada vez más certeros.
Sus lanzamientos, que han llegado hasta Tel Aviv, al norte del país, junto con drones e incluso un intento de ataque con un submarino, han exhibido un arsenal de cosecha propia que se ha expandido a pesar del asfixiante bloqueo israelí-egipcio de 14 años.
Años de resistencia
Desde 1987, que se fundó Hamás, el ala militar secreta del grupo que opera junto a una entidad política gubernamental, evolucionó de una pequeña milicia a lo que Israel llama “un ejército semiorganizado”.
De acuerdo con Los Ángeles Times, durante el final de los ochenta, los milicianos organizaban tiroteos y secuestro de israelíes. Mataron a cientos de ellos en actos suicidas en la Segunda Intifada que estalló a finales del 2000.
A medida que la represión israelí avanzaba, el grupo empezó a construir rudimentarios cohetes que impulsaban con azúcar fundida, los “Qassam”. Los proyectiles se mantenían en lo alto durante pocos kilómetros, volando sin control y causando pocos daños, incluso la mayoría caía dentro de Gaza.
Al retiro de las fuerzas israelíes de Gaza en 2005, Hamás creó una línea secreta de abastecimiento de sus antiguos patrocinadores, Irán y Siria, según cita LA Times al ejército israelí.
A través de una intrincada ruta, cohetes de largo alcance, poderosos explosivos, metales y maquinaria cruzaron la frontera sur de Gaza por el desierto de Egipto.
De acuerdo con los expertos israelíes, los cohetes fueron enviados a Sudán, transportados en camiones a través del vasto desierto egipcio y contrabandeados a través de una gran cantidad de estrechos túneles bajo la Península del Sinaí.
Los combatientes de Hamás lograron derrotar a la vieja Autoridad Palestina de Gaza y tomaron el control de la franja costera en 2007.
Mohammed Morsi, un aliado de Hamás, fue elegido presidente en Egipto en 2012, lo que les permitió usar las rutas de abastecimiento. Al año siguiente Morsi fue derrocado por el Ejército egipcio.
Sin embargo, las milicias se abastecieron de cohetes de fabricación extranjera, como Katyushas y el Fajr-5, suministrados por Irán y que fueron utilizados en las guerras de 2008 y 2012.
La cosecha propia
A la caída de Morsi, el ejército egipcio destruyó los túneles. La respuesta, la industria armamentista local.
De acuerdo con Fabian Hinz, analista de seguridad independiente especializado en los misiles en Oriente, ‘la narrativa iraní es que empezaron toda una producción de misiles en Gaza y les dieron las bases técnicas y de conocimiento, ahora los palestinos son autosuficientes”.
“Hoy en día, la mayoría de los cohetes que estamos viendo están construidos en el país, a menudo con técnicas creativas».
Al Jazeera, la cadena de noticias satelital árabe, emitió un documental en septiembre pasado, donde se mostraban imágenes de palestinos reensamblando cohetes iraníes de alcance de hasta 80 kilómetro,s con ojivas de casi 200 kilos de explosivos.
Los milicianos de Hamás desarmaron bombas israelíes sin explotar y les extrajeron los explosivos. Reusaron las tuberías viejas para ensamblar cuerpos de cohetes.
En la producción de cohetes, químicos e ingenieros de Hamás mezclan propulsores a base de fertilizantes, oxidantes y otros ingredientes en fábricas improvisadas.
Toda vía se cree que se utiliza un puñado de túneles para el contrabando a Gaza que permanecen funcionando.
Exhibición del arsenal
Según información del ejército israelí, antes de la actual ronda de combates, Hamás tenía unos 7,000 cohetes de diferente alcance, como 300 misiles antitanque y 100 misiles antiaéreos.
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Ha adquirido vehículos aéreos no tripulados, y se calcula que tiene un ejército regular de 30,000 hombres, incluyendo 400 comandos navales.
En esta confrontación, Hamás ha utilizado nuevas armas, incluyendo aviones no tripulados de ataque, aviones no tripulados enviados al mar, y un cohete no dirigido llamado Ayyash con un alcance de unos 250 kilómetros.
Según Israel estos sistemas han sido eliminados o no han sido usados aún.
Según el ejército israelí, se ha asestado un duro golpe a las instalaciones de investigación, almacenamiento y producción de armas de Hamás. Pero reconocen que no han podido detener los constantes ataques con cohetes.
Los cohetes, a diferencia de los misiles guiados, son imprecisos y la gran mayoría han sido interceptados por el sistema de defensa de Israel “Cúpula de Acero”.
Pero el seguir frustrando la superioridad de fuego de Israel, ese es su éxito.
