Nay Pyi Taw, Myanmar. – (Agencias) Decenas de miles de manifestantes se reúnen el lunes en las calles de las principales ciudades de Birmania, o Myanmar, como parte de la Huelga General convocada contra el golpe de Estado en este país.
De acuerdo con la BBC, las empresas y comercios se han ido cerrado conforme los dueños y trabajadores se suman a la huelga.
Los miles de manifestantes han desafiado la amenaza de los militares de que se dirigían a “un camino donde sufrirían la pérdida de vidas”.
Myanmar se ha visto envuelta en protestas desde el 1 de febrero pasado, en que los militares secuestraron a la primer ministra de facto Aung San Suu Kyi, virtual ganadora de las elecciones pasadas y que los militares no aceptaron.
La Junta Militar ha lanzado una fuerte amenaza a los miles de manifestantes en todo el país a través de la cadena estatal MRTV: «Los manifestantes ahora están incitando al pueblo a un camino de confrontación donde sufrirán la pérdida de vidas». Advirtiendo que no toleraran “una revuelta y la anarquía”.
La advertencia viene después de que la represión de las fuerzas militares contra las protesta produjeron dos muertes el domingo, la jornada más violenta desde que estallaron las protestas, según informó la BBC.
Las manifestaciones exigen la liberación inmediata de la líder Aung San Suu Kyi, quien se encuentra en arresto domiciliario, acusada de introducir dos walkie-talkies de manera ilegal.
La presión internacional también empieza a sentirse. De acuerdo con fuentes del Reino Unido, el lunes en la tarde el ministro de Exteriores del país, Dominic Raab, pedirá la liberación de Suu Kyi.
Al mismo tiempo, este lunes se llevaron a cabo multitudinarias manifestaciones en las principales ciudades del país, como parte de la huelga general.
Thompson Chau, editor del medio local Frontier, le dijo al Servicio Mundial de la BBC que las protestas de hoy «se sienten mucho más grandes que antes, con más calles bloqueadas y tiendas cerradas dondequiera que vayamos».
«Hoy es más bien una gran huelga en el sentido de que todo el mundo no va a trabajar. Todas las tiendas están cerradas.»
Chau añade que incluso aquellos que trabajan para «empresas oficiales del Estado, departamentos de informes y fiscales, médicos del gobierno, ingenieros», se han sumado a la huelga.
La protesta convocada para hoy, que ha sido llamada la “Revolución 2222” porque se realiza el 22 de febrero, se compara con la manifestación del 8 de agosto de 1988, conocida como el levantamiento 8888, cuando Myanmar vivió una de las protestas mas grandes de los últimos tiempos.
El ejército birmano reprimió las manifestaciones antigubernamentales, matando a cientos de manifestantes. Para muchos, la fecha es vista como un momento decisivo en la historia moderna Myanmar.