La pandemia COVID-19 ha ocasionado una alteración social generalizada, lo que ha desencadenado un aumento en los trastornos mentales como depresión y trastornos de ansiedad, de estrés postraumático, de consumo de sustancias, duelo y suicidio.
Así lo señaló Bernal Gómez, secretario de Salud en el estado de Coahuila.
Este 9 de abril, mencionó que ello ha impactado en la salud mental de tres grupos, que son los pacientes afectados por el virus; el personal de salud de la primera línea; y el resto de la población, por las medidas impuestas para disminuir la transmisión viral.
El funcionario hizo énfasis en la tasa de incidencia de suicidios en Coahuila por cada 100 mil habitantes.
En 2019 hubo 237 casos y durante 2020 un total de 279.
“Que no es diferente la cifra en la entidad a si no hubiera habido pandemia”, expresó.
Sobre cómo ayudar a una persona con pensamientos suicidas, informó que lo más importante es dejar que exprese lo que le ocurre; pedir ayuda profesional; retirar de su entorno cualquier objeto de riesgo; no dejarlo solo, y el apoyo de la familia que le dé esperanza.
Incluso, comentó que Coahuila pone a su alcance la Línea de la Vida (911) o bien comunicarse al 800.822.3737, toda vez que es exclusiva para el apoyo a quienes tienen estas ideas por parte de la Secretaría de Salud.
Agregó que también existen programas de apoyo para pacientes COVID y sus familiares, además del Programa de Duelo “Te extraño”, dirigido a niños y adolescentes que habrían perdido alguno de sus familiares.
Como conclusión, señaló que el confinamiento ha tenido un gran impacto en las vidas de las personas, en términos de salud, económicos, laborales y sociales, de forma que es importante brindar apoyo comunitario a quienes viven solos y alentar a las familias y amigos a comunicarse frecuentemente.