París, Francia. – (Agencias) “Tengo un mensaje para mis atacantes, creyeron que me mataban, pero les toca a ustedes temblar”, así se expresó Julie con el brazo y el puño en alto este lunes, ante más de 300 personas reunidas para brindarle su apoyo.
Y es que, Julie comparecerá el próximo miércoles ante la Corte de Casación de Francia donde se decidirá la suerte de los tres bomberos que acusó de violarla cuando tenía 14 años.
A pocas cuadras del Palacio de Justicia, en la Plaza de San Miguel, se reunieron el lunes cerca de 300 personas, entre ellas varias activistas feministas, exigiendo “Justicia para Julie”.
La manifestación cuestionaba el concepto de “consentimiento” que se aplicó para la niña, que tenia en el momento de la violación 14 años.
Para Alice Coffin, dirigente del Partido Europa Ecología Los Verdes presente en la manifestación de París, este caso es un reflejo general de «un sistema, en este caso el de justicia, que es cómplice de la cultura de la violación«.
La historia
Julie estaba siendo medicada con drogas fuertes por un problema psiquiátrico que requirió múltiples intervenciones de los servicios médicos de los bomberos. Su afección mental la hizo vulnerable y dependiente.
De acuerdo con Le Fígaro, en el transcurso de 2009, la adolescente de 14 años tuvo relaciones sexuales con 20 bomberos, en diferentes momentos, todos de unos veinte años, la mayoría pertenecían a la estación de bomberos de Bourg-la-Reine (Hauts-de-Seine).
Julie mantuvo una relación continua con uno de ellos casi durante un año. Sin embargo, Julie denunció que fue forzada a tener relaciones sexuales no consensuadas con dos amigos del bombero una tarde en la casa de este.
Los tres bomberos fueron acusados inicialmente de violación a un menor, un delito que se castiga fuertemente en Francia.
Pero en el otoño de 2018, la fiscalía pidió que se retirarán los cargo de violación, considerando que la “falta de consentimiento” establecida por la demandada era “insuficientemente caracterizada”.
La familia de la joven había apelado, pero su solicitud fue rechazada en noviembre pasado por el Tribunal de Apelación de Versalles.
Las protestas.
Las protestas también se levaron a cabo en otras ciudades de Francia, especialmente frente a la Corte de Versalles, convocada por el colectivo Nous Toutes.
Otra se realizó en Estrasburgo, frente al tribunal judicial donde se lanzaron consignas como “Los violadores en todas partes, la justicia en ninguna parte«, «La víctima es Julie» o «Julie, te creemos».
El padre de Julie, Emu, dijo que estaba “extremadamente conmovido“ por el apoyo. «Va directamente a nuestros corazones, porque cuando presentamos una queja hace diez años, nos despreciaron«, dijo a la agencia AFP. «Las cosas claramente se han movido en la sociedad«, agregó.
