¿Qué pasará cuando nuestro presidente pase a la historia?
Todo lo que el presi ha hecho, es repetir un spot continuo de palabrería sin contenido. Es como si quisiera convencer cada día, cada año, que su administración es ideal para el país. Lamentablemente, queda en eso; en un eterno spot.
En vísperas de un Tercer Informe de gobierno, ya padecemos el mal sabor de boca de los disidentes informes a los que acostumbra el presidente de México, y sin afán de echar a perder la sorpresa que nos tiene López Obrador ¡já!, mire que no pinta nada bien.
Este gobierno transpira por todos lados; ingobernabilidad.
La imagen de este viernes, fue clara. No hubo necesidad de que se maquillara nada. El enjambre de maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) fue la imagen política, tan pobre, que el presidente ha venido manejando.
¡Pos cómo no se nos iba a enojar el presi, si su afán es levantarse temprano para dar cifras contundentes, clases de historia y otros chismesillos políticos en la conferencia mañanera!
Y eso de quedarse en medio del enjambre no le vino en gracia.
Por más que el presi hizo el intento por pasar desapercibido el incómodo momento, lo que adolece su gobierno quedó retratado en lo que parece un presidente arriba de su camioneta, con los brazos cruzados y sin actuar como lo que se supone que tiene que ser un presidente.
Los maestros, hicieron de su gira en Chiapas, una incómoda visita. Esta vez, no hubo foto del platillo Chiapaneco, ni foto en las carreteras con historia y frases pagajosas. Hubo un retrato de la ausencia presidencial ante una de las problemáticas reales del país.
El conflicto magisterial lleva años, la CNTE se perfiló como una estructura más allá de la educación, el problema se agudizó cuando entró en vigor la reforma constitucional.
El mismo presi ha dicho que se ha reunido con la CNTE algunas ocho o diez veces, pero que ya le metieron ideas de su cosecha que no han dejado arreglar la situación.
Hasta hace un año, los miles de maestros de la CNTE piden que se les cumpla lo que la misma Secretaría de Educación Pública en conjunto con el gobierno de Chiapas sellaron, o eso dijeron: nuevas plazas y recursos para la educación. Eso sí, la Secretaría de Hacienda se ha encargado de decir que, “no hay dinero”.
Pero el presi salió más ardido que nunca, y siendo rehén de su incapacidad, se nos hizo la víctima pidiendo que se respete su investidura además dijo que “no acepta chantajes”.
Se aproxima un tercer informe, y vea por el lado que se vea, no hay nada contundente en los resultados de este gobierno.
