Bruselas, Bélgica. – (Agencias) La Unión Europea (UE) ha hecho un llamamiento para que continúe el dialogo en Colombia y sea «un diálogo sólido e incluyente» con todos los actores políticos del país.
Este llamamiento lo hace tras la reunión entre el presidente de Colombia, Iván Duque, y la Comisión del Paro Nacional que finalizó sin avances y sin llegar a acuerdos que ponga fin a las dos semanas de manifestaciones.
Unas manifestaciones envueltas en la violencia policial que se han cobrado la vida de al menos 27 manifestantes y un miembro de las fuerzas del orden.
Ante las denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte del ESMAD, batallón especial antimotines, y de las fuerzas militares para contener las manifestaciones, el embajador de Colombia ante la UE afirma que las autoridades están investigando 61 casos. Pero culpa de la situación a grupos radicales infiltrados.
Según Felipe García Echeverri, embajador plenipotenciario de Colombia ante la UE, “em medio de las protestas se infiltró la violencia”.
“Una violencia sistemática que ha causado de alguna manera que se prolongue una situación que afecta la vida de todos los ciudadanos, no solamente de quienes protestan pacíficamente sino también de quienes no protestan y que ven en esta situación una afectación de sus derechos «,
Las protestas comenzaron desde hace 12 días contra la propuesta de Reforma Hacendaria de Duque. El presidente decidió retirarla ante la escalada de protestas en todo el país, principalmente en Bogotá y Cali.
Sin embargo, las movilizaciones continuaron. La molestia generalizada entre los colombianos es la precaria situación económica que viven y que agudizó por la pandemia. La reforma pretendía la aplicación del IVA a servicios lo que afectaría gravemente el ya de por si maltrecho salario,
Pero, la falta del compromiso por la paz del presidente y la brutalidad policiaca encendió la mecha que mantiene las protestas.
Por su parte, Hugo Orejuela, miembro del Movimiento Marcha Patriótica, dijo que “falta más disposición de la parte del gobierno colombiano».
Y agregó: «También pienso que falta una intervención mucho más férrea y mucho más fuerte por parte de la UE, de los Estados Unidos y de la comunidad internacional presionando al Gobierno colombiano para que detenga, ante todo, la violencia contra la protesta social, que es una violencia a la que han dado un carácter de guerra”.
La UE ha hecho un llamado a detener el uso excesivo de la fuerza en la represión de las protestas, y condena los actos vandálicos realizados por individuos que se mezclan con los manifestantes pacíficos.