Washington, D.C. – (Agencias) Amigos con muchas diferencias, pero esencialmente amigos frente a la Rusia de Putin. Pese a los desacuerdos comerciales el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió a su homólogo francés, Emmanuel Macron, en la Casa Blanca con la mejor de las acogidas.
Biden destacó la histórica alianza con Francia y subrayó los valores democráticos y el respeto a los derechos humanos que unen a ambas naciones, en contraste con la agresión rusa en Ucrania: «Hoy reafirmamos que, como he dicho, vamos a estar juntos contra esta brutalidad. Y seguiremos apoyando firmemente al pueblo ucraniano mientras defiende sus hogares, y sus familias, y sus guarderías, sus hospitales, su soberanía, su integridad contra la agresión rusa».
Macron se refirió a la amenaza de guerra comercial que se avecina entre Washington y Bruselas. Es necesario «re-sincronizar» las agendas, dijo, para evitar que los incentivos fiscales aplicados en Estados Unidos perjudiquen a Francia y a Europa: «Hemos decidido, en contacto con los demás europeos y con la Comisión Europea, desarrollaremos un trabajo que debe ser ahora técnico para resolver el efecto dominó sobre los proyectos que se desarrollan en Europa. Queremos tener éxito juntos, no enfrentados«.
Mientras una comisión bilateral allana obstáculos entre Francia y Estados Unidos, ambos exhibieron ciertas diferencias en las posiciones sobre Irán o China.
La visita viene a zanjar las tensiones que vivieron sus relaciones el año pasado cuando Australia rompió un contrato multimillonario para comprar submarinos franceses y optó por desarrollar submarinos nucleares, pero con ayuda de Estados Unidos.