Conozco a Manolo Jiménez Salinas desde sus inicios en la vida política, un chavo aguerrido con sus ideales, un político nato y un excelente orador.
He visto su vida política crecer, una trayectoria que pocos políticos hacen, limpia y de mucho trabajo.
En el particular caso de la alcaldía o alcaldías , los trabajos los inició el primer minuto de arranque de su gobierno, 12:01 am del día uno de enero del año 2018, una noche fría con brumas y temperaturas congelantes.
Horas después, con la misma temperatura pero ya de día, en colonias periféricas de baja marginación, acompañado de su equipo de trabajo, se unen e inician una entrega de chocolate caliente y cobijas; casa por casa el nuevo y joven edil realizaba esta acción acompañado de su madre, la señora Liliana Salinas.
¿A dónde voy con todo esto?, a la idea esa de que “lo que bien comienza, bien termina” hoy a solo días que de culmine la gestión Manolista, lejos de dormirse en sus laureles, el equipo de trabajo del joven político está en acción entregando obras, limpiando la ciudad, preparando todo para entregar en bandeja de plata la mejor ciudad para vivir, a quien la recibe en óptimas condiciones y tendrá como luego dicen “que llenar la chancla “.
En el paso de mi carrera dentro de los medios me ha tocado ver administraciones estatales y municipales incluso federales muy buenas como la de Jiménez Salinas, sin embargo es molesto ver cómo por cuestiones políticas o simplemente envidias del sucesor deshace programas y acciones exitosos, el alcalde entrante Chema Frausto prometió que estos se quedarían, ojalá y así sea para que esta capital siga con los estándares obtenidos en los cuatro años anteriores.
Una ciudad tecnológicamente iluminada, con seguridad óptima, limpia una urbe que ya aparece en el
mapa nacional no solo por estos factores, sino porque ofrece alternativas turísticas, infraestructura de hospedaje, gastronomía entre muchas cosas más, así quedan 4 años de arduo trabajo, el reflejo de que cuando se trabaja en equipo y se involucra a la sociedad el resultado es bueno.
La sinergia en el servicio público es indispensable si se pretenden lograr los objetivos, y que mejor que al gobernador en turno le caigas bien, este es otro factor para calificar a la administración de Manolo Jiménez como exitosa, el trabajo conjunto y el respeto a la jerarquía, logró que un gobernador lagunero volteara a Saltillo primero para trabajar juntos, luego para pensar en la sucesión, en política los sectores se protegen, y lo más obvio era deducir que el Mandatario Miguel Riquelme Solís entregaría la batuta a un personaje lagunero, hasta este momento el virtual candidato gubernamental del PRI es más que claro, es el joven alcalde el que garantiza para el priismo contener la gubernatura en tiempos muy complejos para el ex partidazo.
En su tradicional posada celebrada a los medios de comunicación, Manolo Jiménez Salinas se despidió practicamente de reporteros, camarógrafos, fotógrafos, columnistas y dueños de medios, agradeció el apoyo brindando en los 4 años que estuvo a cargo de la presidencia municipal de Saltillo, dijo nos vemos en otras trincheras. Hasta pronto Manolo.
