Previo a la toma de protesta de la nueva presidenta del país, la doctora Claudia Sheinbaum, en la capital, se tenían planeadas marchas en contra de la reforma judicial, las cuales también se replicarían en diferentes entidades.
La capital de Coahuila no fue la excepción, y fue alrededor de las 9 de la mañana cuando el contingente salió de la Explanada del Ateneo Fuente hacia el Palacio de Gobierno de Saltillo.
Aunque hay quienes opinan que estas marchas son solo «patadas de ahogado», ya que consideran que la suerte está echada en el poder judicial de la Federación, los manifestantes no perdieron la oportunidad de hacer que su voz y su reclamo fueran escuchados.
En la Plaza de Armas de Saltillo, miembros de la manifestación dieron un mensaje, y todo el movimiento fue pacífico.
Aclararon que no hay ningún problema con sus sindicatos y que continuarán buscando soluciones a sus demandas.