«No sabía que mi sueño de ser médico podría costarme la vida»…
Esta es una de las frases con las que marcharon estudiantes de Medicina de la Universidad Autónoma de Coahuila, la tarde del miércoles 20 de julio, exigiendo seguridad para quienes dejan su casa y se van a hacer servicio social en regiones dominadas por criminales, que exigen servicio médico a punta de pistola, y al final terminan quitando la vida de los trabajadores de la salud.
Fue en el estado de Durango donde Erik, un pasante de médico de 24 años de edad, estaba a 15 días de terminar su servicio, pero un hombre en estado tóxico le quitó la vida cobardemente; mencionan los estudiantes que este es sólo un caso de muchos otros.
Es por ello que estudiantes marcharon por calles de Saltillo, y de otras ciudades de México, exigiendo al gobierno Federal seguridad y mejor trato, pues ahora ser trabajador de la Salud lo ven también como una profesión de riesgo en México, como los periodistas o policías.
