Austin, Texas. – (Agencias) Texas, un estado clave para estas elecciones, que siempre se le considero un estado facil para los republicanos, está rompiendo récords de votación anticipada por persona y por correo, superando el voto anticipado emitido en todo el estado en 2016.
La participación del voto adelantado en el país ha sido enorme. Estimulada por la pandemia y una de las elecciones presidenciales más amargamente disputadas en la historia del país. Cambiando aceleradamente la forma de votación de la jornada electoral.
83 millones de votos anticipados han sido emitidos. Lo que representa un 60% más que hace cuatro años, de acuerdo con el Proyecto Electoral no partidista de Estados Unidos.
En 11 estados ya se superó el número de las papeletas anticipadas emitidas en 2016. Cinco de ellos – Florida, Georgia, Carolina del Norte y Nevada, junto con Texas- son considerados “estados clave”.
Texas, el segundo estado más poblado del país, fue el segundo en superar el número de votos anticipados emitidos en 2016, el primero fue Hawái.
La oficina del Secretario de Estado de Texas, informó estén viernes por la mañana, último día para la emisión del voto anticipado, que 9,009,850 personas ya habían emitido su voto por correo, habían depositado o en los sitios de votación. Hace cuatro años votaron anticipadamente 8,969,226 personas.
De acuerdo con The New York Times, este aumento fue impulsado por una gran participación de áreas urbanas demócratas, como el condado de Harris, en Houston. Pero también en los condados rurales se ha visto un gran número de votos.
Las encuestas dan una ligera ventaja a Trump, prácticamente empate técnico.
Los demócratas no le han puesto mucho dinero y tiempo a Texas. La compañera de fórmula de Biden, la senadora Kamala Harris, acaba de hacer una visita tardía al estado. Visitó Houston, McAllen y Fort Worth. Argumentan que Texas es una “mala inversión”: sus mercado de medios es caro y no es una parada esencial en el camino de Biden a 270 votos electorales.
Los patrones de votación anticipada en las grandes ciudades, como en San Antonio y Austin, no son similares a las votaciones de 2016, cuando Trump ganó por 9 puntos; ni a la de 2018, cuando el senador Ted Cruz ganó por escaso margen al representante demócrata Beto O´Rourke.
El gobernador Greg Abbott, un muy cercano a Trump, ha limitado el número de buzones para depositar el voto por condado, beneficiando a los condados con menos población donde predominan los republicanos. A pesar de esto, la votación anticipada aumento considerablemente.
La falta de buzones para depositar el voto se vio compensada por las inversiones en estructura electoral en el condado de Harris y otros lugares. Funcionarios del condado de Harris abrieron 10 sitios de votación por el todo el condado luchando contra los republicanos que quieren cerrarlos.
Una ampliación del periodo de votación en todo el estado, una acción judicial en contra del gobernador, también contribuyó con el aumento.
