Varsovia, Polonia. – (Agencias) Debido a la violación de la estricta ley de aborto establecida en Polonia, una activista a favor del derecho a decidir enfrentará un juicio la próxima semana. La activista proporcionó una pastilla para provocar un aborto a una mujer embarazada que sufría violencia doméstica.
Justyna Wydrzynska, de la ONG polaca Aborcyjny Dream Team (ADT), está acusada de ayudar ilegalmente a un aborto y, si es encontrada culpable, podría enfrentar una pena de hasta 3 años de cárcel. “Podría ser tratada como la mayoría de las personas en esta situación y recibir una sentencia suspendida de seis meses, o podrían querer hacer de mí un ejemplo y enviarme a la cárcel, tal vez incluso por años”, dijo desde su casa, fuera de Varsovia.
Durante décadas, las estrictas leyes de aborto en Polonia han dificultado el acceso a la interrupción voluntaria segura del embarazo. Sin embargo, en enero de este año, el gobierno nacionalista polaco introdujo una reforma que hace casi imposible que las mujeres accedan legalmente a un aborto seguro. El caso contra Wydrzynska comienza en febrero 2020.
“En el fondo de nuestras mentes, sabíamos que algo así podría suceder. Siempre hicimos público lo que hacemos, nunca lo ocultamos”, dijo Natalia Broniarczyk, miembro de ADT, sobre el trabajo de la organización y las apariciones en los medios de sus miembros.
La ONG había tenido cuidado de operar dentro de la ley polaca, que criminaliza solo a los proveedores de abortos y no a los pacientes a los que se les aplica el procedimiento de interrupción del embarazo.
“La ley sobre ‘ayudar a un aborto’ se remonta a la década de 1990”, dijo Kinga Jelińska, miembro de ADT con sede en Ámsterdam. “En aquel entonces, los abortos quirúrgicos eran la única opción, por lo que se escribió pensando en una participación muy directa de los médicos”.
Para evitar las regulaciones, ADT remitía a las mujeres que buscaban interrumpir su embarazo a organizaciones con sede en el extranjero, donde los medicamentos abortivos, como las más comunes mifepristona y misoprostol, pueden conseguirse legalmente y enviarse por correo. Así, ADT no podía ser acusada de proporcionar abortos directamente.
El caso de Wydrzynska
A finales de febrero de 2020, Wydrzynska envió unas pastillas directamente que tenía en su casa a una mujer que la había contactado. “Esta mujer tenía 12 semanas de embarazo y estaba experimentando violencia doméstica”, dijo Wydrzyńska a The Guardian. “Tuve mi aborto a las 12 semanas y también he estado en una relación abusiva. Sé lo que significa estar en esta situación. Ayudarla fue mi primera respuesta humana”.
El esposo había impedido a la mujer, previamente, viajar a Alemania para realizarse un aborto legal y seguro. Mientras tanto, la pandemia de Covid-19 se afianzaba en el mundo. “El servicio postal de Polonia había hecho anuncios de que el franqueo internacional podía ser suspendido o alterado. Nos estábamos quedando sin tiempo”, agregó Wydrzyńska.
Sin embargo, el día que llegó el paquete, la policía llegó a su casa llamados por el esposo de la mujer. Ella, dijo que el estrés de la investigación policial posterior le había provocado un aborto espontaneo. Más de un año después, la policía se presentó en la casa de Wydrzyńska y confiscó los medicamentos que tenía en casa, así como las computadoras de ella y sus hijos.
“Supongo que es como un embarazo accidental”, bromeó Wydrzyńska. “Era la primera vez que me arriesgaba, y bam: recibí una acusación”.
Wydrzyńska ha estado involucrada en el activismo por el aborto durante más de 15 años, estableciendo la primera sala de chat del país donde las polacas podían intercambiar información sobre las pocas vías de aborto seguro que todavía tenían disponibles. Ella había estado involucrada con ADT desde 2019, que trabaja para desestigmatizar el aborto y poner a las mujeres en contacto con proveedores extranjeros de píldoras abortivas.
“Esta ley de proveer el aborto funciona para aislar a la persona que lo necesita, para que se sienta sola. Queremos demostrar que no están solos. Que puedan contar con nosotros y que puedan contar con sus amigos y familiares”, dijo Jelińska.
