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NAVIDAD EN UNA NUEVA NORMALIDAD

Algo característico en los mexicanos es, sin duda, nuestro temperamento de fiesta, el enorme deseo de festejar por cualquier cosa; el objetivo es celebrar, y qué mejor que sea en un ambiente donde haya amigos, familia, novias, primos, etcétera, etcétera.

Hoy esta “condición pachanguera” que nos identifica en el mundo despertó la preocupación de las autoridades. 

El gobierno de Coahuila una y otra vez llama a través de redes sociales y medios de comunicación escritos y electrónicos al resguardo ciudadano, para evitar la saturación hospitalaria por COVID-19 que hasta la semana pasada se elevó hasta el 92 por ciento.

Las fiestas decembrinas preocupan a la Secretaría de Salud: aunque salió bien librado el día 12 de diciembre, el de La Guadalupana (los templos que veneran la imagen cerraron sus puertas y evitaron concentraciones de católicos), las tradicionales posadas y reuniones familiares tienen en jaque a los llamados héroes de bata blanca, la primera línea de batalla o personal médico, como le quiera llamar.

Y es que quienes combaten la pandemia son precisamente ellos, médicos, enfermeras, laboratoristas y otros funcionarios que viven de cerca los fallecimientos y complicaciones por síntomas propios del SARS-CoV-2, que hoy en Coahuila supera los 47 mil casos con registro con 3 mil 690 muertes.

La inconsciencia de la ciudadanía no se detiene a pensar lo que representa la desobediencia con relación a usar cubre bocas, no salir si no es necesario, juntarse a celebrar con reuniones familiares;  los más de mil 100 millones de pesos invertidos en el combate a Covid-19 no son nada comparable con el dolor ciudadano al observar la muerte de sus seres cercanos.

Otra preocupación de las autoridades estatales, además de las posadas y reuniones por Navidad, es la relajación que provocó la noticia de la aplicación de la vacuna contra el peligroso virus; no se detiene a pensar que el antídoto llegará a los organismos de la mayor parte de la población hasta mediados del año entrante, porque hay que seguir protocolos y etapas  ya definidas, que aquí detallo:

La  etapa  1, del 22 de diciembre a febrero de 2021, para vacunar a personal de salud de primera línea de control Covid-19; la segunda etapa a partir de febrero, para personal de salud restante y personas de 60 años o más; la etapa tres, en el mes de abril a mayo en personas de 50 a 59 años; la cuatro, de mayo a junio para aquellos de 40 a 49 años; y la etapa cinco a partir de junio, al resto de la población.

Las cosas como son.

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