La ley seca no afectó a los negocios dedicados al giro de la venta de vinos o cerveza, consideraron algunos comerciantes.
Aseguraron que incluso ésta les ayudó a tener dos días de descanso, y las ventas no se vieron afectadas.
Así lo compartió Rafael Briones, encargado de un depósito de bebidas embriagantes de la ciudad de Saltillo.
Pese a que las ventas son favorables tanto el jueves como el viernes, durante el sábado y el domingo,acatando la ley, cerraron sus negocios y dejaron de vender sus productos.
Quienes posiblemente sí vieron algunas pérdidas fueron los bares, cantinas o discotecas.