El seis de enero, en el catolicismo, representa la fiesta de Epifanía, la manera de celebrar el encontrar a Jesús y festejarlo.
Lejos de la partida de la Rosca de Reyes, en la misa que comprende desde hace tres décadas su celebración en el primer domingo, en el lapso del 2 al 6 de enero, consideró el sacerdote Mario Carrillo Palacios.
El párroco de la iglesia San Esteban informó que no todos los evangelios abordan el tema de los tres sabios que llegan a Jerusalén en busca del hijo del mesías, el Niño Dios.
“El evangelio de San Mateo es el único que relata el acontecimiento. Dice que llegaron unos magos de Oriente, y buscando al rey de los judíos que acaba de nacer, llegan a Jerusalén ante Herodes a preguntar, y se desarrolla lo que conocemos”, relató.
De hecho, en el evangelio de San Mateo no especifica la palabra “reyes”, más bien, son sabios del Oriente, personas que leen los astros, las leyes de la naturaleza, e incluso el nacimiento de un ser supremo.
El párroco citó las distintas maneras de celebrar el día de los Santos Reyes.
“Las formas en que se celebra esta fiesta, es mediante la Rosca de Reyes, que es un momento de convivencia donde, compartiendo un pan, se busca al niño Jesús; pienso que hay un abuso porque a veces comercialmente le ponen 15 niños y el significado debe ser Cristo”.
Hay quienes piensan que, cuando se parte el característico pan dulce con pasta, frutas y caramelos, encontrar al niño Dios en su interior representa mala suerte, aunque, por lo contrario, el sacerdote señala que es una bendición.
“Es alegría, porque hasta hago fiesta porque lo encontré, hago una fiesta el día 2 de febrero. Andamos buscando a Cristo y el que lo encuentra, es un privilegio”, señaló.
El dar es el factor común de la aparición en la biblia de los reyes magos, por esto, en algunos lugares de México y el mundo el día 6 de enero es sinónimo de dar y compartir.
“También otra forma de celebrar es dar regalos que hipotéticamente los traen los reyes magos, a muchos niños se les dan los regalos en esta fecha, por ejemplo, en estados del sur del País.
“Los regalos que no les trae Santa Clos, se los traen los Reyes Magos”, finalizó.
