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Padece comunidad LGBTTTI+ estragos de la discriminación

Desde 2004 la Organización de las Naciones Unidas estableció el 17 de mayo como el Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y la Biofobia.

Se elige este día en razón de la fecha en la que se eliminó la homosexualidad de la clasificación internacional de enfermedades mentales por la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud.

El objetivo de esta conmemoración es avanzar como sociedad abierta y crear un ambiente de aceptación y respeto hacia la diversidad y reconocimiento de los derechos de los seres humanos, independientemente de su orientación sexual e identidad de género. 

Noe Leonardo Ruiz es un activista defensor de los derechos de la comunidad LGBTTTI+ y por años ha luchado en nuestra sociedad saltillense contra la discriminación. 

Señala que además de pugnar por crear una conciencia social, la lucha se extiende al interior de la misma comunidad LGBTTTI+, pues son los mismos integrantes de esta comunidad quienes realizan actos de discriminación por diferencias y orientación sexual o expresión de género. 

Noé Ruiz es presidente de la Comunidad San Aelredo A.C., y gracias a su posicionamiento tiene datos claros respecto a los crímenes de odio que ocurren en nuestro país.  

Según cifras de Observatorio Nacional en México se han registrado 87 asesinatos contra la comunidad, de estos 11 por ciento son lesbianas, 2 por ciento son bisexuales, 28 por ciento son mujeres transexuales, y 37 por ciento de hombres gay. 

Es por eso por lo que describe este 17 de mayo “como un día para vivir y sobrevivir mostrando el orgullo de existir”.

Por otro lado, Alberto García ha vivido la experiencia de la descremación en una trinchera distinta.

Él se reconoce gay y tiene la fortuna de poder compartirlo con su familia, en donde encontró un refugio de amor y aceptación.  

Sin embargo, manifiesta que afuera, en la sociedad, es totalmente distinto.

Reconoce que las etiquetas, el odio y los insultos son un reto del día a día, cuando ser homosexual no es una ofensa sino una expresión más del amor.