Argel, Argelia. – (Agencias) Tras un megaproceso contra un centenar de personas acusadas de apalear y quemar vivo a Djamel Ben Ismail, un músico de 38 años, que se había ofrecido de voluntario para combatir los incendios forestales que devastaron la región de Cabilia, en el este de Argel, en 2021, y que causó 90 muertos. La sentencia de muerte cayó sobre 49 de ellos, mientras que 37 de los acusados han sido sentenciados a penas de prisión que van desde 2 a 10 años, según informó la agencia estatal de noticias APS.
Yamel se encontraba custodiado por la policía en la localidad de Larbaa Nath Irathen, cuando decenas de hombres jóvenes lo sacaron del vehículo policial onde se encontraba. Ben Ismail se había entregado después de haber sido confundido con un pirómano por ser simplemente un extranjero.
Probablemente las sentencias de muerte sean conmutadas por cadenas perpetuas ya que en Argelia se mantiene una moratoria de pene de muerte desde hace treinta años, desde la guerra civil entre el ejército y milicias islamistas que cobró la vida de más de 100,000 vidas.
El musico había llegado a la Cabilia, una región bereber con fuerte sentimiento nacionalista, desde la ciudad árabe de Miliana, a 120 kilómetros de la capital de Argelia, tras desencadenarse numerosos incendios forestales en agosto de 2021. Yamel empezó a escuchar de que se le consideraba el sospechoso de producir los incendios y fue a entregarse a la comisaría de Larbaa Nath Irathen.
Una turba de hombres jóvenes se concentró y se dirigió al Centro de Policía donde se encontraba el musico arrestado arriba de un camión, y lo sacaron por la fuerza, según se pudo ver en los videos tomados por celulares y difundidos por las redes sociales. Después de ser arrastrado y golpeado por la multitud, lo despojaron de sus cosas incluso su celular y lo quemaron vivo. Uno de los videos mostraba a dos mujeres apuñalando su cuerpo después de quemados.
Los videos, así como imágenes y selfis tomadas al lado del cadáver de Yamel, fueron reproducidas y usadas como pruebas incriminatorias. El tribunal de Dar el Beida, en la periferia de Argel, basó su sentencia sobre los cargos de “homicidio voluntario con premeditación” y “actos terroristas y subversivos contra el Estado y la unidad nacional”.
Cinco de los sentenciados a muerte fueron juzgados en rebeldía tras huir del país por su implicación con la muerte de Yamel y su pertenencia al Movimiento de Autodeterminación de La Cabilia (MAK), de acuerdo con fuentes jurídicas citadas por la agencia Associated Press (AP). Entre los que se encuentra Ferhat Mahenni, líder del MAK exiliado en Francia, al que acusan las autoridades de haber dado la orden de provocar los incendios, con la presunta colaboración de Marruecos. Los abogados defensores han denunciado que las confesiones de culpabilidad de los acusados fueron arrancadas a base de torturas.
En 2019, la Cabilia fue escenario de grandes manifestaciones de protestas del movimiento popular argelino del Hirak, que depuso al presidente Abdelaziz Buteflika, que pretendía perpetuarse en el poder tras veinte años en el poder.
