Un hogar modesto que pertenecía a una mujer de la tercera edad y a su hijo quedó reducido a cenizas.
El incendio fue provocado por una veladora encendida en honor a San Judas Tadeo, que no se colocó con la debida precaución sobre un plato con agua.
La señora, que almacenaba ropa usada para vender y así poder subsistir, perdió todo lo que tenía. Esa ropa, que le brindaba unos pocos pesos, fue consumida por el fuego, junto con los muebles y pertenencias que había en los alrededores.
María del Rosario, junto a su hijo, ahora se encuentran con una pequeña cama y esperan recibir ayuda para remover los escombros, la ceniza y limpiar los dos cuartos donde viven
Aunque no es mucho, dicen que es un techo bajo el cual pueden comer y dormir, y eso es lo más importante.
Viven en un callejón ubicado en la calle División del Norte, en la colonia Panteones, de la ciudad de Saltillo, Coahuila.
A pesar de la tragedia, su fe no se ha perdido, y confían en que podrán levantarse, como el ave fénix, desde las cenizas.
Por ello, solicitan el apoyo de la sociedad para poder recuperar lo perdido.
