Este 17 de mayo, en Torreón, el presidente de México, Andrés López Obrador, y el Gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme Solís, se unieron en la Petición de Perdón a la Comunidad China en México.
“Nos unimos a la Petición de Perdón a la Comunidad China”, expresó el mandatario estatal, mientras que el Presidente destacó la imperante obligación de asumir la responsabilidad con el pueblo chino.
El embajador de China en México, Zhu Qingqiao, agradeció la ceremonia de hoy, que cura cicatrices de la historia.
El Ejecutivo Federal señaló que dentro de la marcada polarización “clasista y racista” que se vivía en la región en 1911, tuvo lugar el llamado “pequeño exterminio”, que causó la muerte a 303 chino-mexicanos de Torreón, en los aciagos días del 13, 14 y 15 de mayo.
“Este acto no sólo nos obliga a asumir nuestra responsabilidad y culpa, sino también a aceptar el compromiso con el pueblo y la República Popular China de que el Estado Mexicano permitirá nunca más el racismo, la discriminación y la xenofobia”, señaló.
En tanto, el ejecutivo estatal refrendó el respaldo de su Gobierno al pueblo chino, así como el respeto, acompañamiento y solidaridad con quienes son descendientes de las personas que sobrevivieron a aquellos trágicos acontecimientos de mayo de 1911.
Mencionó que la ceremonia de este día es para reconocer la responsabilidad de nuestra sociedad, de nuestro estado y del país por el ataque xenófobo que en mayo de 1911 causó la muerte de 303 personas de origen chino en esta ciudad de Torreón.
Recordó que en los últimos siete años han emprendido sus operaciones en territorio coahuilense 14 empresas globales de origen chino, que con una inversión de 7 mil millones de dólares han incrementado las fortalezas de Coahuila para enfrentar los desafíos económicos.
“En nuestro Gobierno trabajamos con un marco muy claro y garantista de los derechos culturales, de la inclusión, la equidad y no discriminación”, aseguró el gobernador.
Sergio Ley López, embajador Emérito y ex embajador de México en la República Popular China, expuso las razones y los principios que obligan, como una Nación que se reconoce en la historia, a pedir perdón por los agravios cometidos contra la comunidad china residente en México en las primeras tres décadas del Siglo 20, especialmente al conmemorarse 110 años de los ataques ocurridos en Torreón.
El embajador de China en México, Zhu Qingqiao, expresó que a través de este evento se consuela a las vidas perdidas y se curan las cicatrices que ha dejado la historia.
Señaló que el agravio de los chinos en Torreón ya pasó hace más de 100 años, y que el México de hoy se ha convertido en un lugar para la convivencia entre las personas de diferentes colores, creencias y culturas.
