Al presentarse en eventos públicos acompañado de seguridad privada asignada por la fiscalía especializada de protección a periodistas y defensores derechos humanos, el obispo emérito de Saltillo, Raúl Vera López es protegido porque se teme por su vida.
Sin dar más detalles, quien asiste al obispo comentó que después de amenazas que recibieron directamente de atentar en contra de su vida, el obispo emérito se apegó al protocolo de protección a periodistas y defensores de derechos humanos que ofrece el gobierno federal por el riesgo de correr peligro su vida, aunque ninguna de estas amenazas se ha cumplido o ha sufrido el obispo algún atentado señalaron sus cercanos.
Este domingo el obispo emérito Raúl Vera participó en la marcha de conmemoración del movimiento del ’68 del 2 de octubre cuando jóvenes fueron asesinados y desaparecidos en la plaza Tlatelolco en la ciudad de México.
Se le vio en todo momento acompañado de seguridad privada, que son elementos asignados de la Guardia Nacional.
