Washington, D.C. – (Agencias) La recesión, aunque no oficialmente, está ya presente en la economía de Estados Unidos al contraerse el Producto Interno Bruto (PIB) en el último trimestre a 0.9% la tasa anual, continuando con la caida después de caer 1.6% en los primeros tres meses del año, anunció el Departamento del Comercio de Estados Unidos.
Esto será un duro golpe para el presidente Joe Biden ante la inminente dura batalla de las elecciones intermedias, ante el crecimiento de los republicanos que amenazan con volver al control, al menos, de la Cámara de Senadores. Los funcionarios de la administración han tratado de no hablar de recesión, argumentando que muchas partes de la economía están solidas.
Sin embargo, la tasa de crecimiento anualizada se contrasta significativamente con el fuerte aumento del PIB en el último trimestre de 2021, que registró un 6.9% cuando la economía se recuperó después de la pandemia de Covid. El que dos cuartos del año se tenga crecimiento negativo del PIB se considera una señal de que la economía ha entrado en recesión.
Si bien las cifras negativas del PIB influirán en el responsable de decir cuando empieza y cuando termina la recesión, La Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER), también se analiza una gama de factores económicos, incluido el mercado laboral, es probable que no tome una decisión pronto. Sin embargo, la presión sigue sobre la administración Biden.
La confianza del consumidor está cayendo a medida que aumentan los temores de una recesión, de acuerdo con las encuestas, pero, además, los índices de aprobación general y económicas de Biden se encuentra en los niveles más bajos de su presidencia.
La publicación del Departamento de Comercio sobre las cifras del PIB se dio días después de que la Reserva Federal aumentara nuevamente la tasa de interés de referencia tres cuartos de punto porcentual para tratar de detener la inflación histórica del país, que ha llegado a niveles históricos non vistos desde hace 40 años, al registrar un aumento en los precios de 9.1% en junio impulsado por los combustibles, los alimentos y la vivienda.
La perspectiva económica confusa ha provocado ventas masivas en los mercados bursátiles del mundo, y ha llevado a algunos economistas a predecir la llegada de la recesión. Las preocupaciones más amplias sobre la guerra en Ucrania, las perspectivas financieras mundiales y los aumentos agresivos de las tasas de interés han llevado a muchos economistas a predecir una recesión para el próximo año. De acuerdo con la encuesta del Financial Times del mes pasado, casi el 70% de los principales académicos economistas dijeron que la economía de Estados Unidos entrará en recesión el próximo año.
Sin embargo, el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, insistió el miércoles que no creía que Estados Unidos estuviera hoy en recesión. Dijo que la Fed estaba preparada para seguir subiendo la tasa de referencia de manera que bajen los precios y que tal medida desaceleraría la economía y afectaría el mercado laboral.
“La estabilidad de precios es lo que hace que toda la economía funcione”, dijo Powell.
