Las lluvias del fin de semana saturaron los albergues de Saltillo con personas que necesitaban ayuda. Aunque el refugio de los necesitados no cuenta con mucho presupuesto, sus puertas están abiertas.
Este fin de semana, más de 40 personas se refugiaron en esta casa ubicada en la calle de Múzquiz, en el centro de Saltillo.
Adultos, niños y adultos mayores, algunos residentes de Saltillo y otros de paso, se convierten en familia por unos días o unas horas. Comparten la comida si la hay, y si no, salen a buscar ayuda y la juntan para beneficio de todos. Algunos cuartos presentan problemas de humedad y el patio se inundó, pero todos trabajaron juntos para secarlo y estar seguros en el refugio.
Durante años, este refugio de los necesitados ha mantenido sus puertas abiertas y hoy hacen un llamado a la comunidad para aquellos que quieran apoyarlos.
Las puertas también están abiertas para que puedan llevar algo que pueda ayudar a aquellos que necesitan un refugio en el futuro.




