Rio de Janeiro, Brasil. – (Agencias) Para intentar frenar el avance de la segunda ola de coronavirus, el alcalde en funciones de Rio de janeiro, Marcelo Crivella, informó en rueda de prensa que la ciudad dará marcha atrás en la desescalada y cerrará las escuelas públicas.
Crivella explicó que se optó por «interrumpir» el funcionamiento de las escuelas para «controlar la curva y que vuelva a la estabilidad».
El alcalde también informó que, para evitar aglomeraciones por las compras de Navidad, los centros comerciales serán autorizados a abrir 24 horas al día.
El 2 de diciembre, el comité científico de la alcaldía de Río recomendó prohibir la permanencia de bañistas en las playas. Así como, limitar el horario de funcionamiento de bares y restaurantes, y realizar más controles en el transporte público, pero no se implantaron más restricciones.
Río de Janeiro acumula casi 23,000 muertes por COVID-19 y más de 365,000 casos confirmados desde el inicio de la pandemia.
En las últimas semanas, el número de contagio creció hasta el punto de que apenas hay camas para pacientes de COVID-19 en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales y muchos enfermos están siendo derivados a ciudades vecinas.