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Se desmarca Templo de San Francisco ante negativa municipal de instalar comercios en fiesta patronal

Luego de que el Departamento de Unidad Administrativa de Comercio del Ayuntamiento de Saltillo no autorizó la instalación de comercios en la vía pública, en el marco de la fiesta patronal de la iglesia de San Francisco, algunos locatarios manifestaron su descontento.

El Municipio argumentó las obras de arreglo y saneamiento del centro histórico de la ciudad para no conceder la instalación de los tradicionales puntos de venta anuales.

Ante ello, José Daniel Ramos Rocha, rector del Templo, aclaró en un comunicado que no éste no tiene injerencia alguna en la decisión de cambio de lugar, logística o prohibición de la instalación de dichos comercios, y que tampoco se beneficia en lo económico de ellos.

Aquí, el comunicado, íntegro:

“Con motivo de la fiesta de nuestro seráfico Padre San Francisco, como cada año, nos hemos preparado de manera espiritual y logística en lo que respecta a las celebraciones litúrgicas, devocionales y culturales elencadas en el programa general del tradicional Novenario (del 25 de septiembre al 3 de octubre), con miras a la gran fiesta a celebrarse el ya próximo 4 de octubre.

“Hago de conocimiento a todos los fieles y devotos de San Francisco de Asís que, por motivos de las obras de arreglo y saneamiento del centro histórico de la ciudad, el pasado 19 de septiembre hemos recibido la notificación de parte del Departamento de Unidad Administrativa de Comercio de la “no autorización para la instalación de comercios en la vía pública”, por lo que hago saber, a nombre de la comunidad de la Fraternidad de los Frailes Franciscanos y de fieles del Templo de San Francisco, que ningún puesto de comercio depende de la iglesia ni de ningún grupo de pastoral, y que no recibimos absolutamente nada de los ingresos económicos en ellos obtenidos. 

“De la misma manera, no tenemos ninguna injerencia en la decisión de cambio de lugar, logística o prohibición de la instalación de dichos comercios. Apuntalo que nuestra coordinación, organización y responsabilidad es sólo para con las actividades antes mocionadas en el ámbito espiritual y religioso que se realizan dentro de la iglesia.

“Pedimos a Dios por el buen desarrollo de la fiesta tradicional en honor a nuestro Santo Patrono y pedimos por el orden y beneficio de todos en la medida de nuestras posibilidades siempre acatando las disposiciones de las autoridades competentes”.