Al grito de “no contaban con su astucia”, un grupo de policías disfrazados del Chapulín Colorado atraparon a unos ladrones.
En una inusual y sorpresiva operación, los uniformados decidieron disfrazarse para así sorprender y detener a un grupo de ladrones que tenían acechada la zona.
Autoridades del lugar detallaron que policías disfrazados se infiltraron entre los ciudadanos que acudieron al carnaval, con el propósito de detener a unos ladrones que anteriormente habrían sido señalados.
Gracias a esta inusual estrategia se logró la detención de una banda de ladrones que se dedicaba al robo de teléfonos móviles, tras haber recibido más de 500 denuncias.